Tokio, 28 feb (.).- La Bolsa de Tokio cerró plana este miércoles, con un retroceso del 0,08 % en su principal índice, el Nikkei, dando un respiro a su reciente racha de tres sesiones de cierres récord, por la recogida de beneficios y a la espera de nuevos estímulos.
El Nikkei, que agrupa a los 225 títulos más representativos del mercado, cedió 31,49 puntos, hasta 39.208,03 enteros.
El selectivo más amplio Topix, que incluye a las firmas de la sección principal, las de mayor capitalización, bajó un idéntico 0,08 %, ó 2,12 puntos, hasta quedar en 2.676,34 unidades.
El parqué tokiota experimentó una sesión volátil en la que la recogida de beneficios tras los recientes máximos históricos del Nikkei sirvió como contrapeso del optimismo sobre la evolución del mercado bursátil del país asiático, junto a la falta de estímulos que catalicen un nuevo impulso en la plaza.
Muchos inversores optaron por contener su frenesí a la espera de la publicación en las próximas horas de indicadores económicos clave para la inflación en Estados Unidos, donde Wall Street cerró en la víspera mixta con una caída de su selectivo de referencia, el Dow Jones, a la espera de pistas sobre la salud económica de ese territorio.
El sector de los productos misceláneos, el del transporte marítimo y el del caucho registraron las principales pérdidas del día.
Las empresas más negociadas de la jornada cosecharon cierres mixtos. El fabricante de equipos de análisis para semiconductores Lasertec, el valor más negociado del día, cayó un 1,39 %, mientras que el fabricante de chips Tokyo Electron (TYO:8035) subió un 0,63 %.
El grupo de telecomunicaciones a inversión Softbank (TYO:9984) cedió un 0,81 %, y la firma automotriz Toyota (TYO:7203), un 0,33 %.
La multinacional tecnológica y del entretenimiento Sony (TYO:6758) perdió un 0,07 % tras el anuncio en horas previas del despido de 900 personas vinculadas a su rama de videojuegos.
En la sección principal, 698 empresas bajaron frente a 906 que subieron, mientras que 47 cerraron sin cambios.
El volumen de negociación ascendió a 4,78 billones de yenes (unos 29.290 millones de euros).