Tokio, 10 mar (.).- El principal índice de la Bolsa de Tokio, el Nikkei, subió un 0,03 % este miércoles después de que el yen frenara su retirada, una tendencia que beneficia a los exportadores, por la preocupación por la subida de los rendimientos estadounidenses.
El Nikkei, que agrupa a los 225 títulos más representativos del mercado, avanzó 8,62 puntos, hasta 29.036,56 enteros.
El Topix, que incluye a las firmas de la primera sección, las de mayor capitalización, sumó un 0,11 % o 2,06 puntos, hasta situarse en 1.919,74 unidades.
El parqué tokiota abrió al alza, animado por la recuperación de las tecnológicas estadounidenses, que se había visto bajo presión recientemente, pero no tardó en caer en terreno negativo y verse envuelto en una sesión volátil que cerró prácticamente plana.
El optimismo por la recuperación del sector tecnológico se vio contrarrestado por la persistente preocupación por un nuevo aumento de los rendimientos de los bonos estadounidenses que pueda generar inestabilidad en los mercados financieros.
El sector farmacéutico y el de la electrónica cosecharon las principales ganancias del día, mientras que el minero y el del hierro y el acero registraron las mayores pérdidas.
La firma de impresión Dai Nippon Printing registró la mayor subida de la sesión entre las empresas que cotizan en el Nikkei, del 7,3 %; seguido por el fabricante de motocicletas Yamaha Motor (T:7272) (4,98 %) y la empresa de fotografía Ricoh (T:7752) (3,83 %).
Las mayores caídas del Nikkei estuvieron protagonizadas por el proveedor de servicios médicos a través de internet M3 (6,18 %) y la eléctrica Tokyo Electric Power (TEPCO) (T:9501), que cayó un 5,37 %.
El grupo Softbank (T:9984) aglutinó el mayor volumen de operaciones del día y bajó un 0,09 %.
Le siguieron por transacciones el grupo textil Fast Retailing (T:9983), propietario de la cadena de tiendas de ropa Uniqlo, que cayó un 2,41 %; y la tecnológica Sony (T:6758), cuyas acciones se revalorizaron un 1,75 %.
En la primera sección, 879 empresas avanzaron frente a 1.218 que retrocedieron, mientras que 97 cerraron sin cambios.
El volumen de negociación ascendió a 2,9 billones de yenes (22.440 millones de euros o 26.640 millones de dólares).