Lisboa, 9 mar (EFE).- El presidente de Novo Banco, Eduardo Stock da Cunha, dijo hoy que desconoce el valor de la entidad financiera que lidera y aseguró que su proceso de venta no está entre sus mayores preocupaciones.
Stock da Cunha hizo estas declaraciones durante una videoconferencia en la que presentó los resultados correspondientes a los cinco primeros meses de actividad de la entidad, creada en agosto tras la disolución del Banco Espírito Santo (BES).
El máximo responsable de la entidad recalcó que la misión de los actuales administradores es "crear valor para Novo Banco" y que las preguntas sobre la venta deben dirigirse al Banco de Portugal.
"Nosotros no somos los dueños del banco, somos la cara visible ante 8.000 personas", explicó en referencia al número de clientes, al tiempo que tampoco quiso comentar sobre en qué momento será vendida la entidad, que registró pérdidas de 468 millones de euros entre agosto y diciembre.
Según la información aportada por el supervisor bancario luso, quince entidades participan en el proceso de venta de Novo Banco, que pueden presentar sus propuestas -todavía no vinculantes- hasta el próximo 20 de marzo.
Aunque no se conoce la lista con los quince seleccionados, la prensa lusa apunta a que en ella figuran los españoles BBVA (MADRID:BBVA), Banco Popular (MADRID:POP) y Santander (MADRID:SAN).
En la carrera por hacerse con el Novo Banco también participa el Banco Portugués de Inversiones (BPI), cuyo máximo accionista es Caixabank (MADRID:CABK), que recientemente lanzó una OPA para absorberlo.
A esa posible absorción respondió el segundo máximo accionista del BPI, la multimillonaria angoleña Isabel Dos Santos, proponiendo una fusión de la entidad con el Banco Comercial Portugués (BCP, segundo mayor banco del país), operación sobre la que fue cuestionado hoy Stock da Cunha.
El banquero se limitó a comentar que, si llega a concretarse, sería "interesante", pero subrayó que los administradores del Novo Banco no deben preocuparse por posibles "movimientos de concentración" en la competencia.
Stock da Cunha también se refirió a los afectados por la compra de papel comercial del BES, un instrumento que fue vendido a clientes minoristas a los que se hizo creer que estaban invirtiendo en un producto de bajo riesgo.
En ese sentido, sostuvo que esa deuda no es responsabilidad de Novo Banco, ya que fue vendida antes de su creación, pero afirmó que "es posible alcanzar una solución".
Así, desveló que el Banco de Portugal no les ha prohibido buscar una solución para estos clientes, a pesar de que no tienen la obligación legal de hacerlo, pero reconoció que es un asunto "difícil" por tratarse de "deuda de terceros".