Raimundo Díaz
Madrid, 5 oct (.).- Cuatro años después de ser nombrada presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Elvira Rodríguez Herrer deja hoy el organismo supervisor en un momento complicado para los mercados financieros por los condicionantes políticos, tanto nacionales como internacionales.
Con un gobierno en funciones, con la sombra del "Brexit" y el cambio de tendencia en la política monetaria estadounidense, Elvira Rodríguez se retira del cargo por "imperativo" legal. Le acompaña la vicepresidenta, Lourdes Centeno.
El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, desvelaba ayer que las muchas tareas pendientes del organismo supervisor serán asumidas por su consejo, que afrontará el vacío de poder generado por la imposibilidad de alcanzar un acuerdo parlamentario que permitiera la continuidad de Rodríguez o Centeno al frente de la CNMV.
Recientemente, Elvira Rodríguez recordaba los trabajos efectuados por el organismo supervisor durante su mandato y enumeraba algunos quehaceres pendientes.
Llegó a la presidencia de la CNMV en el otoño de 2012, poco después de que España pidiera el rescate por los problemas de liquidez y solvencia de buena parte del sistema financiero nacional.
Entre las tareas que tuvo que afrontar figuraban la trasposición de las directivas financieras europeas (MIFID II) o los escándalos relacionados con la comercialización de productos financieros complejos -preferentes- entre pequeños inversores. Además, decidía el levantamiento de la prohibición de las ventas a corto plazo en bolsa.
Durante su mandato, y en parte como consecuencia de la crisis financiera desatada en 2008, Elvira Rodríguez ha participado en el reforzamiento de la legislación financiera a nivel internacional y a través de los órganos supranacionales existentes, algunos creados poco antes de alcanzar la presidencia de la CNMV.
En su vertiente gestora, la casi expresidenta de la CNMV ha procurado agilizar los trámites administrativos de este organismo para favorecer las inversiones en los mercados financieros nacionales y adoptar una política supervisora preventiva.
El semáforo de la CNMV, un sello que deben llevar los productos financieros, quedará en su haber, así como las inspecciones de incógnito en las entidades financieras. Afrontar algunos escándalos, como los de Pescanova o Gowex, también figurarán en su currículo.
A nivel internacional, su actividad ha estado relacionada con los proyectos de unificación de los mercados europeos y con la regulación surgida de la crisis financiera y su trasposición en España, así como con la interacción con los organismos reguladores (ESMA, IOSCO o EIOPA). Para ello, creó una nueva dirección en la CNMV.
Elvira Rodríguez Herrer nació el 15 de mayo de 1949, está casada y es madre de cuatro hijos. Es licenciada en Ciencias Económicas y Comerciales por la Universidad Complutense de Madrid, con la calificación de sobresaliente.
En 1972 accede al Cuerpo de Intervención General del Estado, mientras que entre 1978 y 1984 ejerció como subdirectora general en la Intervención de la Seguridad Social. En este último período, entre 1981 y 1983 participó en las comisiones para confeccionar el primer Plan General de Contabilidad Pública.
A partir de mediados de 1980, empieza a ocupar cargos públicos de relevancia. De 1984 a 1996 ejerce como subdirectora general del Tribunal de Cuentas y de 1996 a 2000 desempeña el puesto de directora general de Presupuestos.
En los tres años siguientes, será secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos y ejercerá como ministra de Medio Ambiente durante un año, entre las primaveras de 2003 y 2004.
Además de los cargos vinculados con el Partido Popular, fue consejera de Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid a partir de 2006 y desde 2007 a 2011 presidenta de la Asamblea de Madrid.
En julio de 2011 fue nombrada senadora en representación de la Comunidad de Madrid, aunque en noviembre entró a formar parte de las listas al Congreso por Jaén, y fue elegida diputada.
En la Cámara baja, fue la presidenta de la Comisión de Economía y Competitividad, la misma que tuvo que dar el visto bueno a su nombramiento en la CNMV.