Fráncfort (Alemania), 10 dic (EFE).- El Banco Central Europeo
(BCE) no discute si la agencia de calificación Standard & Poor's
(S&P) tuvo razón en rebajar la perspectiva crediticia de España pero
considera que el informe que acompaña ese aviso "es difícil de
rebatir".
Así lo afirmó hoy en declaraciones a Efe el miembro del comité
ejecutivo y del consejo de gobierno del BCE, José Manuel
González-Páramo, que invita a leer la nota de S&P sobre la economía
española: "Es corta, está en internet y es para todos los públicos".
S&P rebajó ayer la perspectiva de la calificación del crédito
soberano español de "estable" a "negativa", aviso que se sumó a la
degradación aplicada por esta misma agencia a Grecia dos días antes.
La Bolsa reaccionó a las decisiones de S&P con bajadas, que
fueron más marcadas en Grecia y en España que en otras plazas
europeas pues "los comunicados de las agencias de calificación se
reflejan en el riesgo país", explicó.
"Los mercados reaccionaron de distinta manera. No voy a decir si
la reacción fue excesiva o insuficiente, pues eso está por ver, pero
sí que es normal que cuando una agencia emite un informe como el de
ayer sobre España los mercados revisen sus posiciones", señaló.
Opinó que esa revisión puede ser para bien, pues "estos avisos
son escuchados con mucha atención por los gobiernos y les llevan a
hacer lo necesario para restaurar la credibilidad en los mercados".
Recordó en ese contexto que S&P ha sido la única agencia que ha
rebajado su calificación del Reino de España, que mantiene la triple
AAA en todas las demás, lo que significa que "hay que entender el
mensaje en su contexto. Las calificaciones crediticias no son una
ciencia exacta".
En su mensaje, S&P se refiere a la credibilidad de una política
económica orientada a mantener la estabilidad presupuestaria e
insiste en que hacen falta medidas enérgicas para asegurar que en
2012 ó 2013 la situación presupuestaria está bajo control pues,
según la agencia, las medidas adoptadas no son suficientes.
"Yo creo, con matices, que es difícil no estar de acuerdo con esa
observación", sostuvo.
González-Páramo recordó que el informe se refiere asimismo al
nivel de endeudamiento del sector privado, que calificó de
"realmente extraordinario" pues ronda el 180 por ciento del PIB.
La agencia de calificación advierte que, si no se toman medidas
enérgicas no sólo presupuestarias, sino en el mercado de trabajo,
será difícil que el crecimiento sea vibrante "y crecimiento es lo
que se necesita para hacer frente a los problemas actuales", dijo.
Al comentario de que la lectura de S&P coincide básicamente con
la del BCE, González-Páramo respondió: "Pues no voy a decir que no".
Pero, según el alto cargo del BCE, la nota de S&P tiene una parte
positiva y es que reconoce que la economía española entró en la
crisis en una posición relativamente sólida de sus finanzas
públicas, aunque advierte que esta ventaja se ha perdido en muy poco
tiempo y que el esfuerzo por hacer es "muy importante".
"Estoy convencido de que las autoridades españolas comparten este
análisis y harán lo necesario para evitar que la perspectiva
negativa de S&P se concrete en un cambio de calificación", dijo.
Preguntado por la reacción del mercado de divisas a la
recalificación de Grecia y el aviso a España, González-Páramo
aseguró que las decisiones de S&P no se han traducido en una presión
sobre el euro.
"El euro no está bajo presión, de modo alguno. El euro es una
moneda que se basa en tres pilares y esos tres pilares están
funcionando bien a mi modo de ver", subrayó.
Recordó que "hay una política monetaria considerada la más
creíble del mundo, unas políticas fiscales que han respondido con la
intensidad requerida y que ahora planifican el repliegue y un
compromiso en el Ecofin con calendario, para cada país distinto".
"España esta comprometida con sus socios a hacer lo que tiene que
hacer para que la política fiscal del área en su conjunto sea
coherente con la estabilidad macroeconómica", señaló González-Páramo
para quien "el euro o la sostenibilidad de este proyecto no depende
de la situación económica de un país". EFE