Francia está abogando por una revisión significativa de las regulaciones europeas, particularmente aquellas relacionadas con las normas Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ESG). Esta iniciativa surge en un momento en que Europa lucha por mantener su competitividad frente a la extensa desregulación en Estados Unidos, impulsada por el presidente Donald Trump.
Según un documento de 22 páginas consultado por Bloomberg, el gobierno francés ha propuesto una "pausa regulatoria masiva". El informe, fechado el 20.01.2024, sugiere que es necesario reevaluar y modificar la legislación reciente. Las leyes vigentes se consideran "mal adaptadas" al nuevo entorno de creciente competencia internacional y a las políticas poco cooperativas de los principales rivales globales.
Este llamado a la revisión se produce en un momento crítico para Europa, que busca recuperar su ventaja competitiva en el mercado global, especialmente frente a la amplia desregulación al otro lado del Atlántico. El documento del gobierno francés subraya la urgencia de reevaluar el marco regulatorio actual y la posibilidad de realizar ajustes para adaptarse mejor al panorama empresarial internacional contemporáneo.
La propuesta francesa pone de manifiesto la tensión entre mantener altos estándares ESG y garantizar la competitividad económica. Este debate podría tener implicaciones significativas para las empresas que operan en Europa y para los inversores que se centran en criterios ESG.
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