Madrid, 15 sep (.).- Los gestores de flotas prevén que la crisis que afecta actualmente al sector, lastrado por el incremento de los costes y la escasez de personal, se agudizará durante el próximo invierno y en 2023, según la compañía especializada en la gestión del ciclo de vida de vehículos Solera.
Solera ha explicado este jueves en un comunicado que las principales preocupaciones de los gestores de flotas para los próximos meses son el incremento en los precios de los carburantes, la falta de conductores profesionales y la necesidad de cumplir con las exigencias de los clientes.
Concretamente, el 59 % de los gestores de flotas considera que el encarecimiento de los combustibles será el principal desafío de 2023, casi uno de cada cuatro teme los efectos que pueda tener en el sector una recesión económica y preocupa la falta de conductores, especialmente en Austria, Alemania y Reino Unido.
Pese a la situación del sector, los clientes continúan elevando sus exigencias, provocando que cerca del 80 % de los gestores haya tenido que incrementar la velocidad y eficiencia de sus entregas para mantener los niveles de satisfacción de sus clientes; y aumentando el volumen de entregas por encima de los esperado en los últimos seis meses.
En este sentido, los gestores consideran que la tecnología es un elemento fundamental para combatir la situación, aumentar el crecimiento general del negocio y mejorar la situación y la seguridad de los conductores.
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