(Actualiza la EC4240 con valoraciones de Exceltur)
Madrid, 11 jul (.).- El ministro de Turismo, Jordi Hereu, ha situado en las comunidades autónomas y los ayuntamientos la responsabilidad de gobernar el turismo en función de sus singularidades, mientras que la alianza Exceltur le ha urgido a que se acabe, también desde el Estado, con el "desparrame" de los pisos turísticos.
Para el ministro, "hay que fomentar la sostenibilidad a medio y largo plazo" del turismo, porque si no puede ocurrir que la sociedad "se gire en contra" de un sector del que dependen directamente más de 2,8 millones de familias.
Así, todos tenemos "el gran reto de gobernar el turismo", que implica "tener la capacidad de acotar y regular la oferta", pero, en su opinión, han de ser las administraciones locales y autonómicas las que elijan los instrumentos y estrategias para hacerlo en función de la realidad de cada caso.
Esa creencia de que regular es imprescindible, asegura Hereu, es "ya transversal en todos los territorios" y forma parte de "cualquier gobierno, de todos los colores políticos".
"La vivienda de uso turístico es evidente que ha subido enteros en la agenda pública política de todas aquellas administraciones que quieren y tienen que gobernar el control de la oferta turística", ha reconocido el ministro.
El registro de pisos turísticos, para marzo-abril de 2025
Sobre los territorios turísticos más tensionados, Hereu ha defendido que la vía para evitar conflictos es la regulación, que compete a los gobiernos autonómicos y son los que pueden controlar la legalidad de los pisos turísticos.
Para ayudar en esa tarea, el Gobierno trabaja en un registro único de pisos de alquiler temporal, incluidos los turísticos, que el Gobierno quiere que esté listo hacia "marzo o abril" del próximo año y será desarrollado por la Sociedad Estatal para la Gestión de la Innovación y las Tecnologías Turísticas (Segittur).
A su juicio, "hay ciudades que nunca han controlado nada y por eso ahora hay un exceso de oferta y hay oferta ilegal", mientras que otras "lo vienen haciendo desde hace muchísimos años".
Dejación política
Sin embargo, el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda, ha criticado con dureza que los gobiernos y las administraciones "de todos los colores" hasta ahora han hecho "dejación de funciones", porque "tenían miedo a actuar contra una ilegalidad que pudiera acarrear pérdida de votos en unas elecciones".
Por ello, Exceltur reclama un gran pacto de colaboración entre el sector público y privado y pide que se convoque de forma urgente un renovado Consejo Español de Turismo para sentar las bases de una estrategia-país, con sus derivadas en las comunidades autónomas.
Además, pide al Gobierno central que consideren los pisos turísticos como cualquier otra actividad económica, gravada con un IVA mínimo del 10 %; que exijan a las plataformas que cada piso alojado en sus servidores sea legal y que empoderen a las comunidades de vecinos para que puedan impedir el establecimiento de este tipo de viviendas.
A las administraciones locales les instan a hacer cumplir sus propias normas. Como ejemplo, ha dicho que en Madrid hay solo 1.000 viviendas turísticas legales por 18.000 ilegales.
El gran reto del turismo, añade el ejecutivo de Exceltur, "no es jactaros de batir récords de afluencia, un indicador cada día más simplista". Son necesarios, ha dicho, otro tipo de indicadores y estrategia y otras políticas, que no se centreN en el crecimiento ilimitado en las mismas épocas del año.
Hereu no teme un rechazo social
El ministro dice no temer que en España crezca el rechazo social contra los turistas, la llamada turismofobia. A su juicio, lo ocurrido la semana pasada en Barcelona (donde ciudadanos dispararon con pistolas de agua a turistas) hay que "ponerlo en su sitio", pues "una fotografía, por muy icónica que sea, no refleja la realidad de todo un país".
Se ha mostrado confiado que en que ese rechazo social no vaya más, siempre que España haga "los deberes" y redistribuya los beneficios que genera el turismo, aumente salarios, controle horarios y, en general, eleve la calidad laboral en el sector.
"Yo he sido alcalde de Barcelona y sé que cualquier hecho en las Ramblas a veces coge una dimensión de proyección internacional injusta y exagerada, porque (...) somos una cultura hospitalaria", ha dicho Hereu, tras condenar el ataque a turistas.
Sin embargo, para el vicepresidente de Exceltur este tipo de actuaciones contra los turistas son "líneas rojas" que no se deben traspasar.
mgl-