Zaragoza, 31 jul (.).- Ibercaja ha obtenido hasta junio un beneficio neto de 69,2 millones, un 8,9 % menos que en el primer semestre del año pasado al efectuar una dotación de provisiones por 70,1 millones extraordinarios para anticiparse a los posibles impactos de la crisis sanitaria de la COVID-19.
Según ha informado la entidad este viernes, la contabilización de 53 millones de euros correspondientes a la comisión fija obtenida por la novación del contrato de seguros de no vida con CASER, cuyo importe total asciende a 70 millones, ha compensado, en parte, el impacto de estas provisiones extraordinarias.
Ibercaja destaca que a pesar de la situación a causa de la pandemia ha mantenido el dinamismo de su actividad comercial en los primeros seis meses del año, implementando además una importante batería de medidas para atender las necesidades más urgentes de sus clientes particulares, autónomos, pymes y empresas.
Ibercaja destaca que su actividad comercial ha mantenido el vigor y el volumen de recursos de clientes ha crecido en 1.952 millones, un 3,2 por ciento respecto al mismo periodo de 2019, hasta 62.595 millones.
La formalización de créditos y préstamos ha avanzado un 35 % en el semestre respecto al mismo periodo del año anterior, hasta 3.451 millones, el 76 % de ellos destinado a la financiación de empresas no inmobiliarias (2.300 millones), mientras que las formalizaciones de hipotecas alcanzaron un volumen en el semestre de 555 millones, lo que supone una caída del 1,7 %, muy por debajo del retroceso del 20 por ciento registrado por el sector.
Los recursos de clientes totales administrados por el banco han alcanzado 62.595 millones, 1.952 más que al cierre de 2019,, lo que supone un crecimiento del 3,2 %.
Según la entidad, los depósitos de clientes (vista más plazo) ha crecido un 6,7 % hasta 34.970 millones y la gestión de activos y los seguros de vida han registrado un incremento del 5,6 % hasta 27.624 millones, un nivel similar al computado al cierre de 2019 (-0,9 %).
Los ingresos recurrentes (la suma del margen de intereses y comisiones) se cifraron en el semestre en 450,2 millones, un 4,1 % menos, y los costes de explotación han disminuido un 3,8 % interanual, hasta 282,2 millones.
De este modo, el resultado antes de saneamientos se cifra en 217,8 millones, un 11,7 % más que el registrado entre enero y junio de 2019 por la comisión obtenida en la renovación del contrato de distribución de seguros de vida con CASER.
Las provisiones totales netas en el semestre han sido 113,5 millones, de ellos 70,1 para anticiparse al impacto potencial los resultados del ejercicio de los efectos la crisis sanitaria.
El banco ha reforzado la solidez financiera de su balance, con una mejora del ratio de capital CET1 Fully Loaded de 98 puntos básicos en este semestre, hasta alcanzar el 12,3 %.
En términos de Phased In, el capital CET1 se cifra en un 13,3 %, mientras que el ratio de Capital Total se sitúa en el 17,8 %. En ambos casos, superan holgadamente los requerimientos SREP para 2020: 8,125 % y 12,5 %, respectivamente.