Madrid, 7 sep (.).- El consejero delegado de Repsol (BME:REP), Josu Jon Imaz, ha dicho este miércoles que el gas no se ha encarecido solo por la guerra de Ucrania, sino por una transición energética que "se está haciendo mal" en España y en Europa.
Imaz, durante su participación en el VII Foro de Energía de El Economista, ha recordado que en España está prohibido explorar gas por la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, cuando hay gas en Álava y en Burgos.
Ha apuntado que las empresas españolas pagan mucho dinero por el gas y no se deja que se produzca en España, mientras en Europa se empuja para que los inversores salgan del negocio "ahogando" a la comunidad financiera para que no invierta en gas.
Imaz ha dicho que hay que replantear la transición energética, y ha advertido de que los hidrocarburos se van a necesitar muchos años y el petróleo y el gas durante décadas, y si no se hace algo, sus precios van a seguir subiendo y "el problema tendrá un tamaño mayor".
"En Europa hemos hecho una transición energética ideológica", ha dicho Imaz, en la que se ha rechazado invertir en determinadas fuentes de energía, y la consecuencia, según ha señalado, es que los consumidores pagan más por la energía y el CO2 aumenta.
Imaz ha defendido una transición "inteligente", y que las familias no tengan problemas para pagar la energía o las industrias paren porque no pueden pagar el gas.
En el caso de Repsol, que ha recordado que es el principal consumidor de gas de España, ha dicho que está reduciendo el consumo de gas en sus plantas industriales.
EL IMPUESTO DE LAS "TRES MENTIRAS"
Imaz también se ha referido al impuesto sobre los beneficios extraordinarios de las energéticas y ha dicho que es el de las "tres mentiras", pues no es un impuesto porque sería ilegal al introducir un doble imposición.
Además, ha añadido que no es sobre los beneficios, porque se aplica sobre las ventas y una empresa puede estar perdiendo dinero y tener que pagarlo, y, además, ha señalado que, en el caso de las petroleras, no es un extraordinario, pues su negocio es cíclico, y a veces ganan y otras pierden.
En este sentido, ha recordado que Repsol ha perdido dinero en los últimos tres años y medio, en concreto 7.000 millones en el periodo 2019-2020.
El presidente de BP (LON:BP) en España, Andrés Guevara, ha criticado que en España no se pueda desgravar en el impuesto las inversiones en energías renovables, como si ocurre en el Reino Unido.
Ha señalado que con ello "más bien se espanta" a estas inversiones y que, por ejemplo, en el caso de BP se pone en riesgo su plan de inversión en España, donde su intención es multiplicar por ocho la que ha hecho desde que está en el país.
Por su parte, el consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar, ha dicho que hay que cuidar a los inversores en infraestructuras críticas de energía en España, y que no es el momento de perder su confianza ni de dañar la capacidad de inversión de las compañías o la competitividad de estas empresas en España.