Huelva, 31 jul (.).- Investigadores de la Universidad de Huelva han demostrado a través de un estudio que es posible integrar la tecnología del hidrógeno en plataformas aéreas, aportando una serie de ventajas, como una mejora de la autonomía, reducción de emisiones y baja huella acústica.
El estudio parte de la necesidad de que el sector del transporte debe adaptarse al nuevo modelo energético e integrar soluciones que permitan una movilidad sostenible, rompiendo la dependencia del petróleo y disminuyendo las emisiones de gases de efecto invernadero, considerándose para ello la tecnología del hidrógeno como un combustible alternativo viable y razonable.
Según ha explicado el catedrático de la Universidad de Huelva José Manuel Andújar y la profesora Francisca Segura en un artículo publicado en la revista IEEE Transactions on Transportation Electrification, lo que han propuesto en su trabajo es el diseño y dimensionamiento desde un punto de vista eléctrico, mecánico y aerodinámico de un sistema aéreo pilotado remotamente (RPAS) propulsado por hidrógeno.
El diseño eléctrico les ha permitido seleccionar el equipamiento que cumple con los requerimientos energéticos y de potencia de la aeronave; con el dimensionamiento mecánico se ha definido la pila de combustible PEM personalizada así como el cálculo del centro de gravedad de la aeronave, y los hallazgos aerodinámicos han permitido conocer el área de las tomas de aire para asegurar la entrada de flujo suficiente para oxigenar y enfriar la pila de combustible, con una presión constante y sin afectar significativamente a la aerodinámica general de la plataforma aérea.
Los investigadores concluyen que este RPAS de ala fija propulsado por hidrógeno propuesto aportaría una serie de ventajas, en comparación con los modelos anteriores, como tiempos de vuelo más largos y una mayor autonomía, haciéndolo adecuado para misiones más largas y tareas de vigilancia.
Asimismo, al utilizar hidrógeno como fuente de energía limpia, el RPAS puede reducir significativamente sus emisiones (cero emisiones), contribuyendo a una operación más verde y sostenible; y optando por un motor eléctrico y una pila de combustible PEM se logran operaciones más silenciosas, minimizando la contaminación acústica durante los vuelos.
Por último, destacan que el control pasivo del sistema de propulsión eléctrica basado en hidrógeno permite que el excedente de energía de la pila de combustible PEM se pueda almacenar en el paquete de baterías.
Esto le otorga al RPAS basado en hidrógeno una característica especial que lo hace único: el RPAS basado en hidrógeno es recargable durante el vuelo, lo que reduce el tiempo en tierra y aumenta la eficiencia.
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