Nueva Delhi, 6 nov (EFE).- La compañía automovilística Jaguar Land Rover, filial de la multinacional india Tata Motors, perdió 371 millones de dólares por las explosiones que tuvieron lugar en agosto en el puerto chino de Tianjin, donde tenía estacionados cerca de 5.800 vehículos, informó hoy la compañía asiática.
"Un gasto excepcional de 245 millones de libras esterlinas (371 millones de dólares) debido a los cerca de 5.800 vehículos involucrados en la explosión", dijo Tata Motors en un comunicado sobre los resultados del grupo entre julio y septiembre de este año.
La compañía india dueña de la firma británica Jaguar Land Rover explicó que "el proceso para finalizar la reclamación al seguro podría tardar algunos meses en concluir, por lo que el seguro y otras recuperaciones potenciales (...) no han sido reconocidas en este periodo".
Tras este coste imprevisto, la firma de coches de lujo, deportivos y todoterreno cerró el trienio con unas pérdidas de unos 139 millones de dólares, frente a los 680 de beneficio en el mismo periodo del año pasado, de acuerdo con la nota.
El grupo Tata Motors tuvo en su conjunto en este periodo unas pérdidas de unos 65 millones de dólares, mientras que en los mismos meses del año pasado logró un beneficio de más de 500 millones.
Estas pérdidas se produjeron en un contexto de "fuertes ventas en Reino Unido, Europa y Norte América que ayudaron a compensar las ventas más débiles en China y otros mercados emergentes en el negocio de Jaguar Land Rover", según la compañía india.
Tata Motors adquirió en 2008 Jaguar Land Rover a la estadounidense Ford (N:F).
Las explosiones que tuvieron lugar el 12 de agosto pasado en una terminal de contenedores del puerto septentrional de Tianjin, cerca de Pekín, donde se almacenaban de forma irregular unas 3.000 toneladas de productos químicos peligrosos, costaron la vida a 164 personas y unas 700 resultaron heridas.