En la semana que concluyó el 17 de enero, los inversores mostraron una fuerte preferencia por los valores de Japón y los de los mercados emergentes, que recibieron una entrada de capital por valor de 1.800 millones de dólares. Esta fue la mayor cantidad de dinero que entró en estos mercados en un periodo de 12 semanas.
Los analistas de Bank of America señalaron el atractivo del índice Nikkei de Japón como destino para los fondos de inversión que buscan alternativas a China.
"El índice Nikkei ha alcanzado su nivel más alto en 34 años, mientras que el mercado bursátil chino está en niveles vistos por última vez durante la Crisis Financiera Global de 2008 (cuando el Nikkei estaba en 7.000 puntos, y ahora está en 36.000 puntos). Un verdadero mercado alcista en Japón se caracteriza porque tanto el yen japonés como las acciones japonesas aumentan de valor. Sin embargo, para el año 2024, las expectativas de una depreciación significativa del yen japonés son lo que está alimentando el sentimiento alcista (es importante señalar que el liderazgo en el mercado se está desplazando de los sectores que se benefician de la inflación de activos, como los bancos, a los que se benefician de un yen más débil, como los exportadores)", escribieron los analistas en su informe.
Además, los analistas señalaron que el índice Nikkei de Japón se beneficia de una tendencia a la que se refieren como flujos de inversión "ABC" o "en cualquier lugar menos China", y observaron que los inversores están estructuralmente infrainvertidos en Japón (Japón representa el 5,5% del All Country World Index, frente al 44% en el año 1989).
Por el contrario, las acciones europeas y estadounidenses sufrieron presiones vendedoras. Los fondos centrados en la renta variable estadounidense sufrieron una retirada de 4.300 millones de dólares, mientras que los fondos europeos experimentaron una reducción de capital de 1.000 millones de dólares.
En el mercado financiero en general, los bonos de alta calificación crediticia fueron los más populares, atrayendo 14.100 millones de dólares, la mayor entrada desde octubre de 2021.
China, por su parte, registró importantes salidas de capital, principalmente de inversores internacionales. Esta retirada de fondos fue la mayor desde el año 2016, según informó Bank of America.
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