NUEVA YORK - JP Morgan Chase & Co (NYSE:JPM). ha revelado sus resultados financieros del cuarto trimestre, que presentan un panorama mixto de crecimiento y descenso. La división de gestión de activos y patrimonios del banco registró un aumento del 7% en los ingresos netos, hasta 1.217 millones de dólares, junto con un incremento del 11% en los ingresos netos, hasta 5.095 millones de dólares. Se observa que el crecimiento de este segmento es orgánico, con un modesto 2%, si se excluyen las aportaciones de la reciente adquisición de First Republic Bank.
En contraste con el éxito de la división de gestión de activos, los ingresos netos globales de JP Morgan Chase para el trimestre experimentaron un descenso del 15%, situándose en 9.307 millones de dólares. Sin embargo, no todo fueron tendencias a la baja para el gigante bancario, ya que los ingresos totales experimentaron una escalada del 12%, hasta 38.574 millones de dólares. Este aumento de los ingresos se vio reforzado por la solidez de la banca de inversión, que aportó mayores comisiones por las actividades de suscripción de acciones y deuda.
A pesar de la caída de los ingresos netos, la salud financiera del banco parece sólida, con un coeficiente de capital Common Equity Tier 1 que se mantiene estable en el 15%. Esta medida clave de la solidez financiera de un banco indica que JP Morgan mantiene una posición estable. No obstante, el banco registró un descenso en el rendimiento de los fondos propios, que ahora se sitúa en el 12%.
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