Sao Paulo, 2 ene (EFE).- La bolsa de Sao Paulo, principal plaza de América Latina, cerró la primera sesión del año con fuertes pérdidas y su índice Ibovespa retrocedió un 2,99 %, hasta situarse en los 48.512 puntos, arrastrada por sus buques insignia.
La petrolera estatal Petrobras, la mayor empresa de Brasil, inició 2015 de la misma forma en la que acabó 2014, en rojo, y arrastró al principal índice del parqué bursátil paulista al terreno negativo.
Las acciones preferenciales de la petrolera, las más negociadas con una participación en el volumen financiero del 9,13 %, bajaron un 6,59 %, mientras que sus ordinarias cayeron un 6,15 %.
Petrobras se encuentra inmersa en un gigantesco escándalo de corrupción, investigado por la policía y que ha llevado al arresto de dos exejecutivos de la petrolera y una decena de directivos de constructoras con las que tenía contratos.
Durante el discurso pronunciado en su toma de posesión, celebrada la víspera, la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, se comprometió a defender a la petrolera, la cual, dijo, tiene "depredadores internos" y "enemigos externos".
La mandataria, reelegida en octubre y quien ayer tomó posesión de su cargo por otros cuatro años, también defendió un ajuste fiscal para equilibrar las cuentas, pero afirmó que éste será realizado "con el menor sacrificio posible para la población".
Las mayores pérdidas de la sesión fueron las de la universidad privada Estacio de Sá, cuyos papeles ordinarios retrocedieron 7,43 %, seguidos de los similares de la cárnica Marfrig (-7,21 %).
En el terreno de las ganancias tan sólo se situaron tres compañías: la eléctrica Eletropaulo (2,77 %, preferenciales), la empresa azucarera y de etanol Cosan (2,45 %, ordinarias) y la fabricante aeronáutica brasileña Embraer (1,68 %, ordinarias).
El volumen de negocios fue de 5.307 millones de reales (unos 1.976 millones de dólares) y el parqué anotó 860.238 operaciones.
Durante 2014, la bolsa de Sao Paulo perdió un 2,91 % después de haber vivido un carrusel por las elecciones del pasado octubre, las sacudidas propiciadas por la crisis y la corrupción, mientras que el real sufrió una depreciación del 12,94 % frente al dólar.
Este viernes, la moneda brasileña se depreció un 0,86 % frente al billete verde, divisa que terminó la jornada negociada a 2,683 reales para la compra y 2,685 reales para la venta en el tipo de cambio comercial.