Madrid, 11 dic (.).- La demanda de vivienda, tanto en alquiler como en venta, quintuplica la oferta disponible, un desequilibrio que tensiona al alza los precios y crea mayores barreras al acceso a la vivienda, según un estudio realizado por el portal inmobiliario Fotocasa.
En concreto, en el mercado de la compraventa en el segundo semestre del año la demanda seguía siendo muy superior a la oferta ya que mientras un 77 % optaba por adquirir una casa, solo un 17 % buscaba venderla.
En el caso del alquiler este desajuste es aún mayor ya que frente al 80 % de personas que busca arrendar hay un 16 % de propietarios que tiene una vivienda disponible para alquilar, de acuerdo con los datos que maneja Fotocasa, que suma más de 1,5 millones de anuncios de vivienda.
Además, un 7 % se encuentra actualmente vendiendo con la intención de comprar otra casa y solo un 4 % ofrece una vivienda para alquilar porque está buscando otra para arrendar.
En este sentido, el portal señala que en la compraventa, la infraproducción de vivienda debido a las dificultades de los promotores no solo para obtener financiación o desarrollar la promoción, sino por la falta de suelo, la lentitud en la burocracia, el aumento de costes de construcción, y la falta de mano de obra hacen muy difícil la ampliación de la oferta en España.
Del lado del alquiler, la oferta disponible está bajo mínimos y se contrae cada vez más debido a los desincentivos de los propietarios para mantener esas viviendas en el arrendamiento, según señala la directora de Estudios de Fotocasa, María Matos.
Los datos de 2023 arrojan un nuevo ligero descenso de los demandantes y un pequeño repunte de los ofertantes de vivienda en alquiler, lo cual apenas supone una leve corrección de un mercado que se mantiene muy desequilibrado, apunta el portal inmobiliario.
En el caso de la compraventa, en un año se ha incrementado en dos puntos porcentuales el número de propietarios que quiere vender una vivienda.
Además, en el segundo semestre del año, según sus datos, la demanda de vivienda (tanto en venta como en alquiler) implicó al 26 % de los españoles mayores de 18 años. Un porcentaje muy cercano al de doce meses atrás (27 % en 2022), aunque sensiblemente superior, al dato reflejado en el primer semestre del año, cuando se quedó en el 23 %.