París, 22 oct (EFE).- La facturación de PSA Peugeot Citroen aumentó un 1,6 % entre julio y septiembre hasta 12.296 millones de euros, frente al mismo periodo de 2013, pese al descenso del 0,8 % de los ingresos en la división automovilística hasta 7.971 millones.
PSA atribuyó hoy en un comunicado ese descenso a las variaciones de tipo de cambio (devaluación de otras divisas respecto al euro) y a la disminución de las ventas de coches nuevos, que no pudieron ser compensadas por el impacto positivo de los ascensos de precios y la comercialización de vehículos en término medio de mayor valor.
El volumen de negocios de la filial de componentes, Faurecia, fue de 4.386 millones de euros en el tercer trimestre, un alza del 6,5 %, mientras que la división financiera Banque PSA Finance aportó 438 millones de euros, un 2 % menos.
En esos tres meses, el grupo francés vendió 643.598 vehículos montados, lo que significa una progresión del 5,4 % respecto a esos mismos meses de 2013, y eso por el ascenso constatado en Europa (7 %, hasta 362.600), y a China y el sudeste asiático (44,4 %, a 182.600).
Sin embargo, las matriculaciones retrocedieron en Latinoamérica (38,2 %, a 47.400 unidades), en Oriente Medio y África (11,3 %, a 39.000), en la región Eurasia (62,4 %, a 7.100) y en India-Pacífico (10,5 %, a 5.000).
En los nueve primeros meses del año, PSA colocó 2.184.500 vehículos montados, lo que representó un incremento del 5,5 %, y eso tuvo que ver sobre todo con la mejora de las cifras en Europa (10,4 %, a 1.318.500), así como a China y el sudeste asiático (32,9 %, hasta 542.500).
Cayeron las ventas entre enero y septiembre en Latinoamérica (30,7 %, a 154.200), Oriente Medio y África (30,7 %, a 120.600), Eurasia (38,6 %, a 34.200) e India-Pacífico (6,2 %, a 14.600).
A finales de septiembre, la compañía tenía acumuladas unas existencias de 393.000 vehículos, 15.000 menos que un año antes.
La empresa insistió en que continúa su estrategia de lanzamiento selectivo de vehículos fuera del mercado europeo, así como en la mejora de su competitividad, en particular en el Viejo Continente.
También detalló sus objetivos financieros para los próximos años, sobre la base de sus perspectivas: calcula que el mercado europeo crecerá este año un 4/5 % y alrededor del 10 % el chino, mientras bajará en torno a un 10 % Latinoamérica y al 15 % Rusia.
En concreto, espera un flujo de caja operativo como muy tarde en 2016 y un flujo de caja operativo acumulado de 2.000 millones de euros en el periodo 2016-2018, así como un margen operativo del 2 % en 2018 en la división automovilística, y del 5 % en el periodo 2019-2023.