En respuesta a la huelga de 45.000 trabajadores sindicalizados en puertos marítimos de la costa este y el Golfo de Estados Unidos que comenzó el martes, las empresas han activado sus planes de contingencia. La Asociación Internacional de Estibadores (ILA), que representa a los trabajadores portuarios en 36 puertos a lo largo de la costa este de EE. UU. y el Golfo de México, se encuentra en un punto muerto con la Alianza Marítima de Estados Unidos (USMX) en las negociaciones salariales. Esta interrupción laboral, la primera de su tipo desde 1977, amenaza con paralizar aproximadamente la mitad de la carga marítima del país.
Según Sea-Intelligence, una firma consultora de transporte marítimo con sede en Copenhague, una huelga de dos semanas podría interrumpir las operaciones portuarias hasta 2025. Ante esta situación, varias empresas globales han tomado medidas para mitigar el impacto en sus operaciones y cadenas de suministro.
Costco Wholesale (NASDAQ:COST), el gigante minorista estadounidense, ha adelantado el envío de algunos productos para garantizar la disponibilidad de artículos navideños y está preparado para redirigir envíos a puertos alternativos, según declaró el CEO Ron Vachris la semana pasada.
Maersk, la empresa danesa de transporte marítimo y logística, advirtió en agosto que incluso un cierre de una semana podría requerir un período de recuperación de 4 a 6 semanas, empeorando la situación cada día que persista la huelga.
C.H. Robinson ha estado asistiendo a sus clientes durante meses, importando carga anticipadamente y diversificando los envíos a diferentes puertos, según Mia Ginter, directora de envíos de Norteamérica. Ginter destacó que un cambio en el volumen hacia la costa oeste podría tensionar los servicios ferroviarios y aumentar la dependencia de los servicios de camiones y transbordo.
Maher Terminals y APM Terminals, ambos miembros de la USMX, ampliaron sus horarios de operación en el Puerto de Nueva York y Nueva Jersey para acelerar el despacho de carga en anticipación a la huelga.
De manera similar, la Terminal Garden City en el Puerto de Savannah y la Terminal Internacional de Norfolk en el Puerto de Virginia extendieron sus horarios de entrada el fin de semana anterior al 30 de septiembre para gestionar el flujo de carga.
Hapag-Lloyd, una importante empresa de transporte marítimo, está monitoreando de cerca la situación y se ha comprometido a mantener informados a sus clientes a medida que se desarrolla la huelga.
Andreas Stihl AG & Co, el fabricante alemán de motosierras, está desarrollando planes para mantener las exportaciones desde su fábrica cerca del Puerto de Virginia, que atiende a más de 80 países.
Designer Brands (NYSE:DBI), la empresa matriz de DSW, ha trasladado la mitad de sus importaciones típicas de la costa este a la costa oeste para evitar retrasos en las entregas a grandes almacenes como Macy's (NYSE:NYSE:M), Nordstrom (NYSE:NYSE:JWN) y Dillard's (NYSE:NYSE:DDS), según informó Ronnie Robinson, el director de cadena de suministro de la empresa.
Jay Timmons, CEO de la Asociación Nacional de Fabricantes (NAM), expresó el lunes su preocupación de que una huelga interrumpiría significativamente las cadenas de suministro de fabricación en todo EE. UU., afectando a miles de millones de dólares en bienes que van desde alimentos hasta vehículos y electrónica que dependen del acceso a estos puertos críticos.
Reuters contribuyó a este artículo.
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