Las acciones de Carvana (CVNA) subieron aproximadamente un 2% el lunes, a pesar de que Kerrisdale Capital anunció que ha tomado una posición corta en las acciones de la compañía.
La firma especializada en ventas en corto describió a Carvana como un "minorista de automóviles con financiación insuficiente y crecimiento limitado".
La semana pasada, el precio de las acciones de Carvana se disparó un 32%, lo que supone una valoración de mercado actual de unos 19.000 millones de dólares.
"Antes de esta reciente subida, la valoración de mercado de Carvana ya era excesiva. Ahora, el precio de sus acciones no sólo es inusualmente alto para un concesionario de automóviles, sino que también supera la valoración de las principales empresas de tecnología", sostiene Kerrisdale.
"Carvana no tiene una trayectoria más prometedora hacia una expansión rentable que CarMax, y desde luego no si se compara con Microsoft", continúan. "Mientras que los competidores en el sector tecnológico están avanzando en una revolución significativa en la inteligencia artificial, los inversores de Carvana se enfrentan a la pérdida potencial debido a la necesidad de servir la deuda multimillonaria de la compañía, que conlleva una tasa de interés de pago en especie del 14%."
Kerrisdale señala que el valor de empresa de Carvana es actualmente un 40% superior al de CarMax, "a pesar de que vende la mitad de vehículos al por menor y no muestra una clara superioridad en márgenes de beneficio, presencia en el mercado o uso estratégico del capital".
La firma sugiere que el precio de las acciones de Carvana debería, como mínimo, alinearse con los múltiplos de cotización de CarMax. Kerrisdale ha fijado un precio objetivo para las acciones en 16 dólares.
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