Las acciones de Nvidia Corporation (NASDAQ:NVDA) experimentaron un importante descenso de valor durante las operaciones previas a la comercialización del lunes, como parte de una caída más amplia del mercado bursátil. Este descenso se debió a la preocupación de que la Reserva Federal pudiera no estar tomando medidas con la suficiente rapidez para apoyar la tambaleante economía de los Estados Unidos.
El valor de las acciones de la empresa disminuyó aproximadamente un 10%, hasta 96,62 dólares, antes de la apertura del mercado. Si esta reducción del valor persiste hasta el inicio del horario oficial de negociación, la capitalización bursátil de Nvidia podría disminuir en unos 260.000 millones de dólares desde su valor anterior de 2,64 billones de dólares al final de la negociación del viernes. Esto también marcaría el precio más bajo para las acciones de NVDA desde mayo de 2024.
Los contratos de futuros para el índice Nasdaq 100 bajaron alrededor de un 4,4%, tras la entrada del índice en una corrección técnica el pasado viernes. Los contratos para el índice S&P 500 bajaron más de un 2,8%, y el índice Stoxx 600 en Europa cayó más de un 2,5%, registrando su pérdida más sustancial en tres días desde junio de 2022.
En Japón, los índices Topix y Nikkei registraron descensos superiores al 12%. El principal índice bursátil de Taiwán registró el mayor descenso en un solo día jamás registrado, y un amplio índice de valores asiáticos experimentó su caída más significativa en más de cuatro años.
La venta generalizada de acciones se vio impulsada por datos recientes que sugerían un debilitamiento del mercado laboral estadounidense, lo que a su vez activó un conocido indicador de una posible recesión. Otros factores, como los elevados valores bursátiles atribuidos al reciente auge de la tecnología de inteligencia artificial y el aumento de las tensiones geopolíticas en Oriente Próximo, también influyeron en la cautela de los inversores.
La reducción mundial del valor de las acciones indica una creciente preocupación por el futuro económico, incertidumbres geopolíticas y dudas sobre si las cuantiosas inversiones en tecnología de inteligencia artificial cumplirán las altas expectativas puestas en ellas.
Los analistas de Goldman Sachs Group Inc. han aumentado su estimación de la probabilidad de que se produzca una recesión en Estados Unidos en el próximo año hasta el 25%, frente a la estimación anterior del 15%, aunque también reconocen razones que podrían evitar una grave recesión económica.
Los analistas de JPMorgan Chase & Co. han ofrecido una perspectiva más negativa, estimando en un 50% la probabilidad de que se produzca una recesión económica.
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