MADRID (Reuters) - Pese a una apertura alcista, el Ibex-35 fue cediendo a lo largo de la jornada del martes a la presión vendedora y tras el primer golpe asestado por las negativas previsiones de crecimiento de la Comisión Europea, las dudas de los banqueros centrales sobre la gestión del presidente del BCE, Mario Draghi, dieron la puntilla al selectivo.
"Las incertidumbres sobre el crecimiento han colocado en pérdidas al selectivo ya a mediodía, pero la información sobre Draghi a media tarde ha hecho el resto", dijo un operador.
A media tarde, Reuters publicó que los bancos centrales en la eurozona se plantean desafiar el miércoles al presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, ya que consideran opaco su liderazgo y errático su estilo de comunicación, y le instarán a actuar de forma más consensuada, según dijeron fuentes del BCE.
Los banqueros están especialmente molestos con la decisión de Draghi de fijar un objetivo para aumentar el balance del BCE inmediatamente después de acordar en una reunión de política económica del Consejo de Gobierno no hacer pública ninguna cifra, afirman las fuentes.
En una sesión marcada por los resultados empresariales, las previsiones comunitarias que apuntan a un estancamiento económico y el crecimiento negativo en algunos países del bloque también supusieron un jarro de agua fría a los mercados.
En el caso de España, la Comisión redujo al 1,2 por ciento y al 1,7 por ciento del PIB en 2014 y 2015 las perspectivas de crecimiento, apostando por un déficit del 5,6 por ciento y del 4,2 por ciento del PIB, respectivamente.
El selectivo español cerró con un descenso del 2,12 por ciento a 10.154 puntos mientras que en el mercado de deuda, el diferencial del bono español subía hasta los 136 puntos básicos.
En la cola del selectivo se mantuvo Indra, con un descenso del 10,76 por ciento tras anunciar unos resultados peores de lo esperado y después de que la CNMV requiriera información adicional a sus cuentas de 2013.
"Indra cae por una acumulación de factores. Por una parte, la acción ha encajado mal los últimos resultados, muy malos en márgenes y flujos de caja, junto con el requerimiento de información de la CNMV", dijo un operador de un banco español.
Los resultados también pasaron factura a Santander, que cedió un 3,4 por ciento tras anunciar unos números sin sorpresas pero que el mercado acogió con escepticismo. BBVA se vio arrastrado por la tendencia, al igual que el resto del sector, que bajó entre el 0,76 por ciento de CaixaBank, muy castigada ya la víspera, y el 3,182 por ciento de Sabadell.
Otros grandes valores también lastraron al índice. Repsol bajó un 2,771 por ciento, Inditex un 2,2 por ciento y Telefónica que se dejó el 1,045 por ciento.
Estos tres títulos junto con el de Santander restaron 122 de los 220 puntos que se dejó el Ibex en la sesión.
La nota positiva la dio el fabricante de hemoderivados Grifols, que subió a contracorriente un 5,24 por ciento, tras unos resultados trimestrales mejores que los previstos.