Madrid, 7 abr (.).- Los bancos pueden bloquear una transferencia de dinero ordenada por un cliente a una plataforma de inversión para adquirir criptomonedas ante la sospecha de que se está produciendo una suplantación de identidad con robo de credenciales, según explica el Banco de España en su portal del cliente bancario.
En esta publicación recuerdan también que los supervisores financieros españoles y europeos han publicado recientemente una advertencia sobre los riesgos de la inversión en criptoactivos, en la que reiteran que no son adecuados para la mayoría de consumidores minoristas, tampoco como medio de pago o intercambio.
Aun así, respecto al bloqueo de determinadas transferencias, el Banco de España argumenta que la entidad puede hacerlo ante la sospecha de que se está produciendo una suplantación de identidad con robo de credenciales, ya que son "frecuentes" los casos de fraude en que se produce un acceso a cuentas tras haber robado las claves al cliente y acaban con una transferencia para adquirir criptomonedas.
También puede ocurrir que el banco clasifique ese tipo de operación como de alto riesgo y decida exigir controles adicionales, como realizar una llamada de teléfono o pedir que el cliente acuda a la oficina.
Entre otras muchas normas, las entidades financieras están sujetas a la Ley de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo, que les obliga a hacer determinados controles con sus clientes, quienes a su vez deberán colaborar en su cumplimiento.
No obstante, cuando una entidad decide adoptar una medida para el cumplimiento de la normativa de prevención del blanqueo que implique restricciones a la operativa de un cliente, debe informarle de ello.
En principio, le debe ofrecer al menos una motivación genérica de por qué adopta esa medida, salvo que la entidad considere que en el caso concreto planteado existen razones especiales de confidencialidad para no hacerlo.
Asimismo, cuando se aplican este tipo de medidas restrictivas de la operativa, deben aplicarse con cierto grado de flexibilidad, valorándose las circunstancias especiales de cada caso concreto, por ejemplo, el estado de salud del cliente o la distancia del lugar de residencia, añade el supervisor.