Por Patricia Vicente Rua y Catarina Demony
LISBOA, 11 mar (Reuters) - La Alianza Democrática (AD), de centroderecha, ganó las elecciones generales del domingo por un estrecho margen y se prepara para gobernar sin mayoría absoluta, mientras el ultraderechista Chega advierte de la inestabilidad si no se le incluye en el Gobierno.
Con el 99,1% de los votos escrutados, la AD obtuvo 79 escaños en la legislatura de 230 escaños, seguida de los socialistas con 77 escaños, lo que llevó a estos últimos a reconocer su derrota.
Chega, que significa "basta", quedó en tercer lugar, cuadruplicando su representación parlamentaria hasta 48 legisladores, tras hacer campaña con un programa de gobierno limpio y antiinmigración.
Los votantes de Chega afirmaron antes de los comicios que Portugal iba mal y querían cambios en vivienda, educación, sanidad y justicia en el país más pobre de Europa Occidental.
El líder de AD, Luís Montenegro, dijo a la prensa el domingo que esperaba que el presidente, Marcelo Rebelo de Sousa, le invitara formalmente a formar Gobierno.
Rebelo de Sousa, que se reunirá con los partidos políticos desde el martes hasta el 20 de marzo, dijo el viernes al diario Expresso que haría todo lo posible para impedir que Chega llegara al poder. Estas declaraciones suscitaron críticas, ya que el jefe de Estado tiene el mandato de permanecer neutral.
El líder de Chega, André Ventura, declaró a la prensa que la votación mostraba claramente que el país quiere un Gobierno de AD con Chega.
El resultado coincidió en líneas generales con los sondeos de opinión previos a las elecciones, pero la victoria de AD fue significativamente menor y el crecimiento de Chega fue mayor de lo previsto, dijo a Reuters el politólogo André Azevedo Alves.
Alves, profesor de la Universidad Católica Portuguesa y de la Universidad St. Mary de Londres, añadió que la fragilidad de un Gobierno de AD, debido a su dependencia del PS o de Chega para aprobar leyes, hace improbable que dure varios años.
Javier Rouillet, de la agencia de calificación DBRS Morningstar, advirtió de que si el nuevo Gobierno no era capaz de aprobar leyes, podría celebrarse otra ronda de elecciones a lo largo de este año o a principios de 2025.
El auge de Chega se vio favorecido por el descontento generalizado con los partidos mayoritarios y la capacidad de comunicación de Ventura, factores que podrían ayudarle a cosechar resultados aún mejores en las elecciones al Parlamento Europeo.
"La desafección política se venía gestando desde hace mucho tiempo", dijo el politólogo Pedro Magalhães, del Instituto de Ciencias Sociales (ICS) de Lisboa. "Pero no había oferta política para hacer frente a esta demanda política".
Marina Costa Lobo, directora del ICS, cree que Montenegro cumplirá su palabra y no llegará a un acuerdo formal con Chega, pero que en el futuro podría haber acuerdos "parciales" entre ambos.
"Es difícil predecir el comportamiento de Chega porque es un partido antisistema", dijo, añadiendo que el éxito de la extrema derecha en Portugal era un presagio de lo que puede esperarse en las elecciones al Parlamento Europeo de junio.
(Reporte de Patrícia Vicente Rua, Catarina Demony y Elena Rodríguez; escrito por David Latona; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)