Madrid, 1 mar (.).- El 60 % de las empresas que conforman el IBEX 35, que engloba a las grandes firmas que cotizan en España, generan más de la mitad de su negocio fuera de España, gracias en su mayoría a la potente internacionalización de sus negocios, un argumento esgrimido por Ferrovial (BME:FER) para impulsar el traslado de su sede al extranjero.
Según los datos extraídos por EFE de la información que todas ellas han remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en las últimas semanas, uno de sus principales competidores, ACS (BME:ACS), factura incluso más del 90 % fuera de España.
Como Ferrovial, el grupo constructor presidido por Florentino Pérez también tiene un amplio negocio en el ámbito de las infraestructuras.
Por su parte, Sacyr (BME:SCYR) -otro gran grupo de construcción y concesiones que forman parte del principal índice bursátil español- factura fuera el 67 %, al tiempo que Acciona (BME:ANA) ingresa en el extranjero el 56 %, siempre según sus respectivos informes correspondientes a las cuentas de 2022.
El martes, 28 de febrero (el mismo día en el que presentó sus cuentas anuales), el Consejo de Administración aprobó trasladar la sede de Ferrovial a Países Bajos y hacer los trámites para tratar de cotizar en EEUU argumentando que es algo derivado de la "creciente internacionalización" de la empresa, de forma que el mayor volumen de su actividad ya procede del exterior.
Concretamente, argumentó que en 2022 el 82 % de los ingresos (aunque según su informe anual de ese año el porcentaje se eleva al 84,7 %) y cerca del 96 % del valor de los fondos propios del grupo procedieron de su negocio internacional, al tiempo que más del 90 % de los inversores institucionales son entidades internacionales.
CINCO GRANDES COTIZADAS ESPAÑOLAS FACTURAN FUERA MÁS DEL 90%
Otras empresas del IBEX 35 que obtienen más del 90 % de su cifra de negocio en el exterior son el proveedor de servicios tecnológicos para empresas turísticas Amadeus (BME:AMA) -uno de las dos mayores del mundo-, el fabricante de aceros inoxidables Acerinox (BME:ACX), la firma catalana de hemoderivados Grifols (BME:GRLS) y la empresa de equipamientos para piscinas Fluidra (BME:FLUI).
Tanto Acerinox como Grifols tienen un tamaño similar al de Ferrovial si se mide por su volumen de facturación.
Los bancos Santander (BME:SAN) y BBVA (BME:BBVA) también ingresan mucho más fuera de España, con el 89 y el 83 % del total, respectivamente, así como la empresa de infraestructuras de telecomunicaciones Cellnex (BME:CLNX) (83 %) o incluso el hólding aéreo IAG (BME:ICAG), propietario, entre otras, de Iberia y British Airways (y en proceso de absorción de Air Europa), que tiene su sede social en Madrid, aunque la corporativa se encuentra en Londres.
INDITEX, IGUAL QUE FERROVIAL
Al igual que Ferrovial, el gigante textil Inditex (BME:ITX), propietario de Zara entre otras marcas y la firma de mayor capitalización bursátil en España, obtiene el 84 % de sus ingresos fuera de España, según su informe anual de 2021.
Inditex también facturó en torno al 84 % del importe neto de su cifra de negocio fuera de ESpañ durante los seis primeros meses de su actual ejercicio fiscal (febrero-julio), aunque habrá que ver en las cuentas de cierre del año que presente el próximo 15 de marzo si la interrupción de su negocio en Rusia -el segundo más potente después de España- hacen que ese porcentaje se reduzca.
En total, son 22 empresas del IBEX 35 (el 63 %) las que ingresan ya más de la mitad fuera de España, entre ellas también la compañía de distribución Logista (BME:LOG), la aseguradora Mapfre (BME:MAP), la operadores de telecomunicaciones Telefónica (BME:TEF) o los laboratorios Rovi (BME:ROVI).
La energética Iberdrola (BME:IBE) -la segunda mayor cotizada española por capitalización bursátil- factura el 63 %, la inmobiliatria Colonial (BME:COL) del 57 %, la cadena hotelera Meliá (BME:MEL) el 55 % y la tecnológica Indra (BME:IDR) el 51 %.
CONTROVERTIDO TRASLADO
El inesperado anuncio de Ferrovial de que, si lo apoyan sus accionistas, trasladará su sede social a Países Bajos, ha generado un enorme revuelo en el ámbito político.
Mientras que desde el Gobierno se le reprocha tal decisión asegurando que "es una empresa que le debe todo a España", desde el PP se vincula esta decisión con el "vapuleo" que a su juicio ejerce el Gobierno contra las empresas españolas.
Con independencia de la lectura política, desde otros ámbitos se llama la atención sobre si podría haber interés por buscar una mayor estabilidad regulatoria, un clima fiscal más atractivo, menores costes de financiación o incluso mayores facilidades para acceder al mercado bursátil estadounidense.
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