Roma, 20 oct (EFE).- La Bolsa de Milán cerró hoy a la baja y su índice selectivo FTSE MIB retrocedió un 0,86 %, hasta situarse en 18.540,10 puntos, tras una jornada precedida por una semana de graves pérdidas y a causa del recelo de los inversores de entrar en el mercado de la UE, según los analistas.
Por su parte, el índice general FTSE Italia All-Share cayó un 0,82 %, hasta 19.611,88 enteros.
Durante la sesión se cambiaron de manos 963 millones de euros por un valor de 2.952 millones de euros.
De las 309 empresas que cotizaron en el listín lombardo, 139 subieron, 154 bajaron y 16 cerraron sin variación.
En cuanto a la prima de riesgo, que mide el diferencial entre el bono alemán y el italiano a diez años, se situó en los 172 puntos básicos y con un rendimiento del 2,58 %.
La Bolsa de Milán acabó la primera sesión de la semana con pérdidas, si bien recuperándose de los descalabros de la pasada semana, en la que llegó a suspender la cotización por exceso de pérdidas a algunos títulos como consecuencia de la incertidumbre de los planes macroeconómicos de Grecia.
Además y según los analistas, los inversores se mantienen aún reticentes a acceder a los mercados de la Unión Europea, cuyo crecimiento es aún lento.
Una coyuntura que se agrava con el dato revelado hoy en su boletín de octubre el Bundesbank, el banco central alemán, en el que se observa que la principal economía del continente "apenas avanza".
De esta jornada, en rojo para la mayoría de los parqués europeos, acabó beneficiándose el sector bancario italiano y títulos como Banca Popolare di Emilia Romagna (1,44 %), Banco Popolare (0,98 %) y Mediobanca (0,87 %) se salvaron de la quema.
También lo hizo la cadena de venta al viajero , Autogrill, que creció un 0,64 % y la multinacional de las telecomunicaciones, Telecom Italia, que subió un 0,58 %.
Por el contrario, las pérdidas estuvieron lideradas por el coloso audiovisual Mediaset (-4,29 %), propiedad del exprimer ministro de Italia, Silvio Berlusconi.
También perdieron valor la cadena de tiendas en aduanas y aeropuertos, World Dury Free (-3,98 %), la aseguradora Unipolsai (-3,09 %), la petrolera Saipem (-2,88%) y el banco Mediolanum (2,70 %), este último también propiedad del político italiano.