Palma, 18 abr (EFE).- Un total de 35.000 personas, principalmente
turistas extranjeros que están en Mallorca, han quedado atrapados
hoy en Baleares y no podrán viajar a la península y a otros destinos
europeos tras el cierre de los aeropuertos de Palma y Menorca por la
nube de ceniza volcánica islandesa, ha informado el Govern balear.
Unos 30.000 turistas están siendo atendidos por los
touroperadores en sus alojamientos para prolongar su estancia en los
mismos, ha explicado el conseller balear de Medio Ambiente y
Movilidad, Gabriel Vicens, en una rueda de prensa urgente.
En total, hoy se han suspendido en los tres aeropuertos de
Baleares 448 vuelos, casi todos en Son Sant Joan. Desde este
aeropuerto no han podido desplazarse a otros destinos nacionales
unas 6.600 personas, y tampoco lo harán otras 300 a Menorca y otros
300 viajeros desde la capital balear a Ibiza.
La situación en los dos aeropuertos cerrados es de total
tranquilidad, han comentado a Efe fuentes de Aena.
Vicens ha pedido a los ciudadanos que no acudan al aeropuerto de
Son Sant Joan para evitar esperas y colapsos innecesarios, y que se
informen de la situación a través del servicio de emergencias 112 o
de su página web.
Los vuelos de emergencia, como los sanitarios o los de incendios,
no están suspendidos, al tiempo que se han aumentado las frecuencias
de los autobuses que realizan el trayecto Palma-Son Sant Joan.
Mientras tanto, el Govern negocia con las compañías marítimas
incrementar las frecuencias de los buques entre las Islas Baleares y
la Península, lo que podría suceder a partir de mañana, lunes. El
conseller ha señalado que aún quedan pasajes para viajar en barco
desde Palma hasta Valencia.
El Ejecutivo insular ha creado un gabinete de seguimiento
permanente al frente del cual se encuentra el presidente balear,
Francesc Antich, y miembros de las consellerias de Movilidad,
Turismo, Sanidad y Consumo e Interior.
La directora general de Consumo del Govern, Concha Obrador, ha
recomendado a todos los viajeros que guarden sus facturas y tickets
ante posibles reclamaciones, mientras que las compañías deben
facilitar la hoja de reclamación a sus clientes.
Dependiendo de las compañías, ha dicho el conseller, los clientes
podrían percibir el coste de su estancia en las islas durante el
tiempo que se vean obligados a estar como consecuencia de la
clausura de los aeropuertos por las cenizas islandesas.
Está existiendo "mucha coordinación" entre las distintas
administraciones, las compañías y los touroperadores, ha destacado
el conseller, que volverá a comparecer ante los medios de
comunicación esta tarde a las 19.00 horas en la sede del Govern
balear. EFE
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