Washington, 26 sep (EFE).- El ritmo de ventas de casas nuevas disminuyó un 2,3 % en agosto, la cuarta caída mensual consecutiva, y quedó en unas 295.000 unidades en el año, el nivel más bajo desde febrero, indicó hoy el Departamento de Comercio.
Desde que en abril de 2011 el ritmo anual de ventas llegó a las 316.000 unidades, el negocio se ha ido frenando mes tras mes.
Aunque las ventas de agosto fueron un 6,1 % más altas que las de un año antes, aún se sitúan en niveles históricamente bajos.
La debilidad del sector inmobiliario es todavía un lastre para la economía de Estados Unidos que, más de dos años después de terminada la recesión, padece un índice de desempleo del 9,1 %.
Cada vez son menos las familias que pueden comprar una casa nueva, y las que están en posición financiera de adquirir un bien inmobiliario tienen a su disposición viviendas usadas a la venta tras la ejecución de hipotecas, o cuyos precios actuales están por debajo del préstamo.
El precio promedio de la casa nueva descendió un 8,7 % en agosto a 246.000 dólares, el más bajo desde enero de 2009. EFE