Berlín, 9 ago (EFE).- El índice selectivo DAX 30 del mercado de valores de Fráncfort (Alemania) se mantuvo hoy sin cambios, a pesar de los nuevos pronósticos de una contracción mayor en la zona euro, y cerró la jornada sólo levemente por debajo de la frontera psicológica de los 7.000 puntos.
El DAX marcó, en los últimos compases de la negociación, 6.965 puntos, prácticamente al mismo nivel que en la jornada anterior, con una mínima bajada de 0,01 %.
Con ello se mantuvo la tónica del miércoles, que asimismo había acabado con un descenso mínimo respecto al martes, y después de que los días anteriores se hubieran caracterizado, en sentido inverso, por varias alzas consecutivas.
La estabilidad es, según los operadores, una nota positiva, teniendo en cuenta que el Banco Central Europeo (BCE) revisó hoy a la baja sus pronósticos de crecimiento de la zona del euro para este año, para pasar a prever ahora una contracción del 0,3 %.
Esta corrección a la baja, más los indicios de una nueva rebaja de los tipos de interés, se hizo notar en las negociaciones sobre el parqué.
Los títulos del Commerzbank fueron los grandes perdedores y cedieron un 4,2 %, mientras que los de Deutsche Telekom lo hicieron en un 1,9 %, después de que se dieran a conocer sus respectivos resultados semestrales.
La dirección de ese banco informó de una caída de beneficios netos por encima del 36 %, mientras que la compañía de telefonía alemana, pese a mantener su ritmo positivo, presentó cifras menos alentadoras que en semestres anteriores.
La estabilidad de las dos últimas jornadas se interpretaba en Fráncfort como una especie de pausa reflexiva, tras las alzas anteriores. EFE