Panamá, 27 ene (EFE).- El conflicto contractual que vive la ampliación del Canal de Panamá no afectará a los aportes de la vía acuática al fisco este año, aunque podría retrasar "un poco" los ingresos adicionales que se preven en principio a partir de 2015, dijo hoy el ministro panameño de Economía y Finanzas, Frank De Lima.
La crisis que amenaza con paralizar las obras de construcción del tercer juego de esclusas del Canal de Panamá "no tiene ningún impacto" fiscal este año "porque el ingreso contemplado por el Gobierno Central (...) es el mismo que tiene el Canal presupuestado", de 1.138 millones de dólares, dijo De Lima.
El Canal de Panamá tiene un presupuesto para el año fiscal 2013-2014 de 2.451,7 millones de dólares, de los cuales un total de 966,3 millones de dólares serán en aportes directos al Estado y otros 171,7 millones de dólares en ingresos indirectos, según los datos oficiales.
Aunque De Lima sostuvo que de momento y pese al conflicto se mantiene 2015 para el inicio de las operaciones del nuevo carril del Canal, los retrasos derivados de la situación "coyuntural" que se registra pueden obligar a "correr un poco", hasta 2016, la llegada de los nuevos ingresos por concepto de peajes.
El ministro explicó en una entrevista con la televisión local que cuando se creó en junio de 2012 el Fondo de Ahorro de Panamá (FAP), con un capital inicial de 1.300 millones de dólares provenientes del ahorro nacional y aportes del Canal, se proyectó un alza en los ingresos al Estado provenientes de la vía a partir de 2015.
Según la ley que creó el Fondo, el mismo se alimentará de las contribuciones del Canal, que según las previsiones oficiales divulgadas entonces por la prensa local podrían sumar unos 30.000 millones de dólares entre 2015, cuando en principio se prevé finalice la ampliación, y 2025.
El Ministerio de Economía y Finanzas sostendrá conversaciones con directivos de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) cuando "toque" elaborar el presupuesto general del Estado para 2015, y establecer cuánto será el aporte del Canal de Panamá para ese lapso, añadió este lunes el ministro en la entrevista con la cadena local TVN.
De Lima enfatizó que el conflicto contractual entre la ACP y el consorcio Grupo Unidos por el Canal (GUPC), liderado por la española Sacyr y la italiana Impregilo, es un "tema coyuntural -al- que se le va a buscar una solución lo más pronto posible".
Reveló que se mantiene que la ampliación culminará el "próximo año", ya sea con el consorcio o con la administración del Canal, por lo que de darse un retraso sería de un "par de meses".
El consorcio y la administración de la ACP mantienen conversaciones desde el pasado día 7 para consensuar un plan financiero que reflote el proyecto de las esclusas, afectado ahora por falta de liquidez del contratista.
El GUPC ha dicho que "sobrecostos" superiores a los 1.600 millones de dólares le han dejado sin efectivo para continuar con la construcción del tercer juego de esclusas, que en principio anunció paralizaría el 20 de enero pasado sin que lo llegara a hacer para dar oportunidad a las negociaciones, que en principio se darán hasta el 1 de febrero.
El consorcio se adjudicó en una licitación en el 2009 por 3.118 millones de dólares, por debajo del precio máximo establecido por la ACP, de 3.481 millones de dólares, el proyecto de las nuevas esclusas, que permitirán el paso de barcos con hasta 12.600 contenedores, casi el triple de lo actual.
La ACP ha dicho que actualmente el ritmo de los trabajos de construcción registran una caída de más del 70 % en comparación con noviembre pasado. EFE