París, 15 jun (EFE).- Sumido en un compás de espera, al igual que el resto de parqués europeos, el selectivo índice de la Bolsa parisina Cac 40 se dejó hoy un buen pellizco del 1,75 % en una mala sesión que la aleja de la psicológica barrera de los 5.000 puntos.
Al cierre de la sesión el índice marcó 4.815 puntos, cuando había abierto la semana por encima de los 4.900, y la cantidad de dinero que se movió fue relativamente bajo, algo por encima de los 3.800 millones de euros.
La reunión del Eurogrupo del jueves se ve todavía lejos en el horizonte para los inversores, que comienzan a contagiarse del fantasma del "Grexit" en lontananza.
El encuentro, un día antes, de la Reserva Federal tampoco deja mucho margen a la tranquilidad para el dinero, temeroso de sus decisiones, si bien los analistas coinciden en destacar que no será fácil que la Fed anuncie grandes cambios.
A la cabeza de las pérdidas en un día en que todos los valores cerraron en rojo, las entidades bancarias sufrieron un particular calvario.
Crédit Agricole cayó un 2,61 %, hasta los 13,04 euros por acción, mientras que BNP Paribas se dejó un 2,42 % (hasta los 55,30 euros), y Société Générale (PARIS:SOGN) un 2,30 % (41,91 euros).
No les fue mucho mejor la jornada a los gigantes automovilísticos galos: Peugeot se desplomó un 4,01% (hasta los 17,96 euros), mientras que su competidor Renault cedió un 2,34 % (hasta los 92,45 euros).