Madrid, 29 abr (.).- El consejero delegado del grupo hotelero Radisson, Federico González Tejera, se ha mostrado a favor de subir los salarios para suplir la falta de personal en el sector hotelero, sobre todo en puestos menos cualificados, que se está detectando en Europa porque "hay margen" para repercutirlo en el precio.
En su opinión, "hay espacio para subir los salarios" y trasladarlo al consumidor porque hay "una demanda importante que, durante la pandemia, no ha viajado, quiere hacerlo y es menos sensible al precio", lo que se ve reflejado en las reservas para el verano a muchos destinos europeos.
Con las restricciones a la movilidad por la covid-19 y los hoteles cerrados, parte del personal se fue a otros sectores, pero sigue habiendo gente que quiere trabajar en turismo, aunque no tanta dispuesta a hacerlo por el dinero y en las condiciones que se ofrecen, ha explicado en un encuentro con prensa.
"Si necesitas gente, hay que pagarla y no pasa nada" porque se puede repercutir en el precio de la habitación y que al final sea el cliente quien decide, ha agregado.
"Si la habitación, en lugar de 80 euros, cuesta 85 euros y el consumidor la paga porque la experiencia es buena, se pueden mejorar los salarios", ha insistido González, que no ve ningún problema en ello e incluso considera que es "sano".
Según González, España ha estado muchas veces encerrada en un círculo negativo de poca productividad y "parte del problema es que parece que tengamos vergüenza de cobrar por lo que hacemos. No, hay que cobrar por lo que hacemos y hay que pagar a la gente, lo que añade valor al producto", ha defendido.
Sin embargo, se ha manifestado en contra de las subidas generalizadas de salarios por decreto para todo el mundo en todas las condiciones, como las del SMI (Salario Mínimo Interprofesional) en España, al considerar que son "un equívoco y una medida absurda" porque "no es lo mismo Madrid ni Barcelona o Valencia que un pueblo en mitad de Teruel".
González prevé que el presente ejercicio terminará aún un 20 % por debajo de los niveles precovid y que 2023 debería ser ya el año en el que se recupere la normalidad, aunque no todos los mercados estarán en la misma situación, dado que se mantendrá cierta incertidumbre y ambigüedad como consecuencia de la pandemia.
Pese a la crisis sanitaria, Radisson ha seguido con sus planes de expansión, con el foco puesto en Asia, donde González ve un gran potencial de crecimiento en países como China o India, pero también en el sur de Europa, destacando Italia y ahora España.
El grupo está acelerando su crecimiento en España, donde espera contar con 25 hoteles en 2025 y actualmente está presente en Barcelona, Madrid, Sevilla, Bilbao y Gran Canaria.
Sus planes pasan, entre otros, por reforzar su presencia en Madrid y Barcelona y desembarcar en Málaga, que es "uno de los destinos que mejor lo está haciendo en Europa y se va consolidando", de acuerdo con el directivo.