Baoding (China), 18 nov (EFE).- El fabricante chino de placas
fotovoltaicas Yingli Solar, sexto mayor del mundo, reconoció que el
sector en España se ha derrumbado este año por la crisis financiera
y el cambio de legislación aplicado.
El representante en España de Yingli Solar, Fernando Calisalvo,
explicó que después de que la demanda se disparara a los 2.000
megavatios en 2008, la cifra total para este año se puede limitar a
100 megavatios, según datos de la Asociación de la Industria
Fotovoltaica en España (ASIF).
Los cambios en la normativa, que hasta el año pasado incluía
subvenciones a la instalación de energía fotovoltaica con hasta 0,44
euros por kilovatio hora (kWh), provocó que el sector se
convulsionara a finales del año pasado, multiplicando los pedidos y
desbordando la oferta existente.
Ante la reacción desmedida, el Gobierno español limitó la
instalación de nueva potencia a poco más de 500 megavatios anuales,
una cifra que desde el propio sector se asume inalcanzable.
"La industria fotovoltaica ha sido la primera que ha recibido en
la crisis", dijo Calisalvo, que apuntó que el impacto negativo lo
han sufrido sobre todo los pequeños negocios surgidos al calor de
las circunstancias favorables y que ahora, ante la caída de precios
por la contracción de la demanda, viven malos momentos.
"Algunos se expandieron más de lo que debieran", resumió el
representante de la firma china en España y Portugal, que el año
pasado facturó por valor de 350 millones de euros en la península
Ibérica.
Los mayores proyectos de Yingli, que trabaja con marcas
eléctricas como Acciona o Endesa, se sitúan en la zona de
Extremadura, Murcia y Castilla-La Mancha, y también destaca el
abastecimiento de paneles para la central fotovoltaica portuguesa de
Moura, una de las mayores del mundo con una potencia instalada de 46
megavatios.
Calisalvo fue, no obstante, halagüeño con el futuro del sector y
aseguró que el mercado se está estabilizando y que para 2010 se
espera llegar a los 600 megavatios de potencia fotovoltaica
instalada.
Yingli Solar celebró estos días en la ciudad de Baoding
(provincia nororiental de Hebei) su conferencia anual, a la que
asistieron clientes de todo el mundo y durante la cual la empresa
mostró su recientemente inaugurada planta de tratamiento de silicio.
La empresa -patrocinadora de la camiseta del Club Atlético
Osasuna- es, junto con Suntech, uno de los gigantes fotovoltaicos de
China, un país que en los dos últimos años se ha convertido en el
principal suministrador de paneles solares del mundo, pero no para
el mercado doméstico.
La firma china tiene previsto llegar a producir 1 gigavatio de
potencia en 2010 a través de sus paneles solares, que se venden
sobre todo en Alemania y Estados Unidos.
En 2008, la compañía, cuyas acciones cotizan en la Bolsa de Nueva
York y que niega tener cualquier tipo de control estatal de Pekín,
registró un beneficio neto de 100 millones de dólares (67 millones
de euros). EFE
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