Investing.com -- J Sainsbury (LON:SBRY) Plc, la segunda cadena de supermercados más grande de Gran Bretaña, ha anunciado planes para recortar 3.000 puestos de trabajo y cerrar sus cafeterías restantes como parte de una iniciativa continua de ahorro de costes. Esta medida se produce tras el presupuesto del Partido Laborista, que ha incrementado las exigencias de ingresos a las empresas.
Los recortes de empleo conllevarán una reestructuración de los puestos en la sede central y una reducción del 20% en los cargos de alta dirección, según anunció Sainsbury el jueves. Estos ajustes afectarán aproximadamente al 2% de los 148.000 empleados del grupo minorista.
Hace cerca de un año, Sainsbury presentó un plan para ahorrar 1.000 millones de libras esterlinas (1.200 millones de dólares) en costes. Sin embargo, tras el primer presupuesto del nuevo gobierno británico en octubre, que supuso importantes aumentos de impuestos para las empresas del país, el ritmo de los anuncios de ahorro de costes se ha acelerado. A principios de este mes, Sainsbury reveló que, por primera vez, dividiría en dos partes un aumento salarial planificado para su personal, mientras hace frente a los costes más elevados.
Sainsbury ha declarado que intentará reubicar al personal afectado en otras áreas de la empresa. La decisión de cerrar las 61 cafeterías restantes se encuentra actualmente en fase de consulta.
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