Seúl, 28 jul (.).- El gigante tecnológico Samsung Electronics (KS:005930) amplió su beneficio neto un 15,3 % interanual entre abril y junio, hasta 11,1 billones de wones (unos 8.320 millones de euros), gracias a la solidez de su negocio de chips, aunque sus resultados se vieron resentidos por una caída de la demanda por la coyuntura geopolítica.
La compañía con sede en Suwon, al sur de Seúl, anotó un beneficio bruto de explotación (ebitda) de 14,46 billones de wones (10.850 millones de euros), lo que marca un incremento del 12,3 % con respecto al segundo trimestre de 2021, según el informe financiero trimestral del conglomerado publicado hoy, jueves.
La ganancia operativa de Samsung Electronics se amplió un 12,2 % interanual en los tres meses hasta junio, hasta 14,1 billones de wones (10.580 millones de euros); y su facturación por ventas creció un 21,2 %, hasta 77,2 billones de wones (54.150 millones de euros).
El fabricante no publica los datos semestrales acumulados.
LA SOLIDEZ DE LOS SEMICONDUCTORES
La empresa atribuyó estos resultados una vez más a la solidez de su negocio de chips de memoria, especialmente para servidores, pese a que las exportaciones de estos componentes fueron inferiores a lo esperado debido a un debilitamiento del consumo que ha impactado en la demanda a causa de factores macroeconómicos.
En términos intertrimestrales, su ebitda retrocedió un 4 % y sus ventas se contrajeron un 0,7 %.
Aun así, éste ha sido el cuarto trimestre seguido en el que el mayor fabricante mundial de chips y teléfonos inteligentes del mundo registra una facturación de más de 70 billones de wones.
Los 77,2 billones de wones (54.150 millones de euros) facturados entre abril y junio constituyen los segundos mejores ingresos de su historia y una cifra récord para un segundo trimestre.
Los chips, dijo Samsung, han sido clave para esos resultados, así como la demanda sostenida de sus modelos móviles insignia, pese a que la ralentización del consumo ha impactado las ventas de la rama. También ayudó un cambio de divisa favorable.
La división de chips logró unas ventas de 28,5 billones de wones (21.370 millones de euros), un 23,6 % más, y el beneficio operativo de la rama aumentó un 44 %, hasta 9,98 billones de wones (7.480 millones de euros), lo que representa el 70 % de la ganancia total del conglomerado en el pasado período fiscal.
Samsung Electronics maneja su negocio de chips principalmente en dólares estadounidenses, pero reporta sus ganancias en wones. El billete verde se sitúa actualmente por encima de los 1.300 wones, una debilidad de la divisa nacional surcoreana que infla la cifra de facturación a la hora efectuar la conversión.
Este cambio le ha reportado al fabricante una ganancia operativa de unos 1,3 billones de wones (980 millones de euros), detalló.
En lo que respecta a la rama de telefonía móvil de Samsung, las ventas fueron sólidas, con un crecimiento del 12,2 % interanual, hasta 7,71 billones de wones (5.780 millones de euros), aunque su ganancia operativa disminuyó un 17,2 % con respecto al año previo, hasta 1,06 billones de wones (unos 795 millones de euros).
INCERTIDUMBRE COYUNTURAL
El gigante tecnológico achacó esta disminución del rendimiento de su división móvil a factores macroeconómicos como la situación geopolítica actual o la subida de la inflación, que han afectado a la demanda y disparado los costes de materiales y logística.
Aún así, "la continua demanda de los modelos insignia para los consumidores" contribuyeron a sostener los ingresos.
Samsung espera impulsar la rama con el lanzamiento de nuevos productos, entre ellos modelos plegables (cuya presentación está programada para el próximo 10 de agosto), la adopción de nuevas aplicaciones de tecnologías de la información, su integración en la industria automotriz y el sector de los videojuegos.
Como es habitual, Samsung Electronics no anunció en su informe de previsiones sus cálculos para el beneficio neto y tampoco desgranó sus cifras por divisiones de negocio.
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