Madrid, 6 sep (.).- Smart inicia una nueva era en el Salón de movilidad de Múnich (Alemania, del 7 al 12 de septiembre) con la presentación del Concept #1, un SUV eléctrico con el que quiere estar presente en los segmentos de coches compactos y pequeños de gran crecimiento.
Smart, que desde 2019 es propiedad de la alemana Mercedes-Benz (aporta el diseño exterior e interior) y de la china Geely (se encarga del resto), destaca del prototipo Concept #1 su diseño progresivo (va pintado en blanco satinado), su equipamiento de lujo (el techo es panorámico de crista, de gran tamaño y con un llamativo anillo de luz) o el hecho de monta la tecnología más avanzada.
Mide 4,29 metros de largo, 1,91 metros de ancho y 1,69 metros de alto. Ofrece cuatro plazas (serán cinco cuando entre en producción) y un espacio para las piernas y codos habituales en coches de mayor tamaño. Esto será posible en parte porque las ruedas están situadas en las esquinas del vehículo, lo que facilita un mayor aprovechamiento de sus cotas.
Cuenta con un potente ordenador central (se encarga del infoentretenimiento, los asistentes a la conducción, funciones específicas de movilidad eléctrica e-mobily, y la arquitectura eléctrica del vehículo), del que más del 75 % de las unidades de control podrán actualizarse en remoto, sin pasar por el concesionario.
Como elemento central hay en el interior un pantalla táctil 3D de 12,8 pulgadas independiente, cuyo menú central es un globo terráqueo, al que asiste un avatar de inteligencia artificial que guiará al usuario por las diferentes funciones.
Otro rasgo característicos de los nuevos Smart que llegarán al mercado es que el teléfono móvil del usuario se podrá utilizar como llave digital.
En definitiva, Smart quiere entrar en una nueva era en la que va a desempeñar un papel muy importante la digitalización, que va a ir acompañada de un nuevo modelo de ventas, en el que los datos que aporte el vehículo permitirán a la marca relacionarse directamente con los clientes.