Tokio, 8 oct (EFE).- La Bolsa de Tokio cayó hoy un 1,19 por ciento, hasta su nivel más bajo en un mes, arrastrada por los pronósticos sobre la economía mundial y japonesa del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El selectivo Nikkei cerró con una bajada de 187,85 puntos, un 1,19 por ciento, y se situó en las 15.595,98 unidades, mientras que el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, retrocedió 15,88 puntos, un 1,26 por ciento, hasta las 1.275,01 enteros.
La jornada volvió hoy a arrancar con pérdidas por los malos resultados en la víspera en Wall Street, y la caída se vio acentuada por la rebaja del FMI de las previsiones de crecimiento de la economía mundial.
El organismo indicó en un informe que el crecimiento económico global será del 3,3 % en 2014 y del 3,8 % en 2015, levemente por debajo de lo calculado en julio.
En el caso de Japón, la previsión de crecimiento de este año se situó el 0,9 %, lo que supone un importante recorte desde el 1,6 % pronosticado el pasado julio.
El decepcionante estado de la economía nipona y la mundial desanimó a los inversores del parqué tokiota que vio cómo todos sus sectores, a excepción del de la pesca, cerraban en rojo.
Las mayores pérdidas las registraron la compañías mineras, seguidas de las de caucho y transporte marítimo.
También vivieron una mala sesión las compañías exportadoras debido a la subida del yen frente al dólar.
El líder mundial del motor, Toyota, se dejó un 1,8 por ciento mientras que Maza Y Mitsubishi Electrics cayeron un 3,8 y 3,2 por ciento, respectivamente.
Las empresas relacionadas con el diodo emisor de luz (LED) han ganado terreno después de que tres científicos japoneses hayan sido galardonados con el Premio Nobel de Física por su investigación en este terreno.
La compañía Endo Lighting y las eléctricas Seiwa Electrics e Iwasaki Electrics registraron ganancias de entre un 2 y un 3,3 por ciento.
Un total de 1.437 valores descendieron durante la jornada de hoy, mientras que 326 avanzaron y 67 cerraron sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 2,17 billones de yenes (15.880 millones de euros), por encima de los 2,01 billones de yenes (14.600 millones de euros) de la víspera.