Madrid, 1 abr (.).- Una situación de bloqueo institucional tras las elecciones del 28 de abril sería la peor de las opciones posibles para la Bolsa española, y según un estudio de XTB el IBEX 35 podría vivir una situación similar a la experimentada tras los comicios de 2015, cuando sufrió un descenso cercano al 9 %.
El estudio de XTB desvela también la mala relación entre elecciones y Bolsa, ya que en todas las ocasiones tras unos comicios el parqué español cerró la sesión inmediatamente posterior con caídas medias del 2,69 %.
Si los cambios de poder suelen acarrear caídas en Bolsa, aclara el estudio, las reelecciones tienden a generar lo contrario, ya que en las ocasiones en las que tras unas elecciones generales el partido con más diputados repite en el poder, se genera de media una subida durante la primera semana cercana al 1,8 %.
En general, prosigue XTB, son los cambios lo que inquieta a los inversores y la continuidad la que ofrece un mejor clima para las subidas; en este sentido, ningún partido se libra de provocar recelos en algún sector de la economía.
El estudio de XTB desvela alguna curiosidad, como que para el principal indicador de a Bolsa española, el IBEX 35, el presidente más "rentable" para los inversores fue Felipe González, con una media anualizada en el IBEX 35 del 12,68 %; le siguen José María Aznar, con un 12,31 %; Mariano Rajoy (7,15 %), y José Luis Rodríguez Zapatero (4,98 %).
El actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se sitúa como el menos rentable y cierra el ránking con una rentabilidad negativa del 1,99 %.
Si se compara la rentabilidad media ponderada de los dos partidos que han gobernado en España, el IBEX, desde su creación en 1992, se revalorizó un 10 % con el PP y un 7,08 % con el PSOE.
Por lo que respecta a los distintos programas electorales, que XTB analiza con mucho detalle; el PSOE, que lidera las encuestas, presenta un programa marcado por políticas sociales, que tienen su contrapunto en un aumento de la presión fiscal, especialmente en ciertos productos como los carburantes o las hipotecas.
Farmacéuticas e infraestructuras son los sectores que más pueden verse favorecidos por estas medidas, y bancos y petroleras tienen más que temer por la posibilidad de gravar ciertas transacciones financieras y de establecer un tipo mínimo al impuesto de sociedades para bancos superior al de otros sectores, así como por la pretensión de imponer un impuesto al diésel.
El PP basa su discurso económico en una fuerte reducción de impuestos y del gasto público, y según XTB bancos y empresas tecnológicas son las que más partido sacarían de estas medidas, en tanto que las eléctricas acusarían la intención del partido de liberalizar el sector energético, eliminar subvenciones y suprimir barreras de entrada para que cada vez haya menos concentración y que exista un mayor número de empresas dentro del sector.
Podemos ofrece un "fuerte" paquete de medidas sociales y económicas centradas en incrementar el estado de bienestar, de las cuales XTB infiere que a las farmacéuticas le conviene que se amplíe el número de medicamentos financiados por el estado, y a las renovables, la intención de la formación morada de aumentar su peso en el "mix" energético.
Por el contrario, los bancos se verían perjudicados si prospera el plan de reestructuración y cancelación de deudas, que incluye entre otras medidas la dación en pago retroactiva; las eléctricas también sufrirían si finalmente se aprueba la obligación de ofrecer un mínimo suministro gratuito de luz y gas a colectivos sociales.
En cuanto a Ciudadanos, su propuesta muestra un fuerte sesgo social y de reducción de costes en materia de gasto energético, además de una más afinada regulación en el sector farmacéutico y sanitario, pero eléctricas y bancos se situarían en un escenario peor si fructifica la idea de recortar los costes asumidos por el ciudadano en materia energética o la monitorización de las entidades bancarias.
De las 100 medidas anunciadas por VOX, el partido revelación de estos comicios, XTB destaca las que más interesan a las empresas de armamento y a las de la construcción, por la sugerencia de liberalizar el suelo, mientras las farmacéuticas acusarían la eliminación del acceso gratuito a la sanidad para ciertos colectivos, y los bancos, las propuestas en materia de pensiones.