València, 1 may (.).- La manifestación del Primero de Mayo en València ha reclamado el pleno empleo para no ser "el farolillo rojo de Europa", más conquistas sociales, mejores salarios, la reducción de la jornada laboral y un reparto más justo de la riqueza, y ha denunciado "el genocidio que sufre el pueblo palestino".
En una jornada ventosa y nubosa, aunque el sol ha lucido a ratos, la marcha ha salido a las 11.20 horas de la plaza San Agustín y en poco más de una hora ha llegado a su final, en Navarro Reverter, donde los líderes de CCOO PV y UGT-PV han pronunciado sus discursos, con un recuerdo al pueblo palestino y la denuncia de unos beneficios empresariales "de récord".
Según ha informado la Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana, en la manifestación han participado unas 5.000 personas.
La ministra de Ciencia, Innovación y Universidades y secretaria general del PSPV-PSOE, Diana Morant, acompañada de otros cargos socialistas del Gobierno y autonómicos y representantes del partido como Leire Pajín, se ha sumado la manifestación reivindicativa y festiva, que ha estado animada por música de batucada.
A la llegada a la calle Barcas, donde se ubican las sedes de las entidades bancarias, los manifestantes han tirado humo rojo para mostrar el rechazo a los márgenes empresariales "de récord" logrados por los banqueros.
Desde los sectores más jóvenes de los sindicatos han portado banderas de Palestina, una de ellas junto a otra de 'Resistencia feminista', y han repetido el cántico 'Palestina libertad'.
Asimismo, la secretaria general de CCOO PV, Ana García, ha comenzado su intervención ante los trabajadores denunciando "el genocidio que está sufriendo el pueblo palestino" y exigiendo que pare "la matanza y se les reconozca como Estado", y el secretario general de UGT PV, Ismael Sáez, ha reivindicado la paz en Ucrania y en Gaza y ha condenado "la fuerza y aquellos que la provocan".
La defensa de la democracia también ha estado presente en las reivindicaciones de UGT-PV y CCOO PV, que denuncian incluso agresiones físicas y el "secuestro" del CGPJ.
La reducción de la jornada laboral ha sido reclamada por los sindicatos enumerando sus avances: sin merma salarial, favorece la conciliación, racionaliza las emisiones vinculadas al transporte, estimula la creación de nuevos puestos de trabajo y revitaliza el sector del ocio.
Tras la manifestación multitudinaria ha partido la organizada por CGT con el lema 'Contra las desigualdades y la precariedad laboral: ¡Acción Directa!', que ha finalizado en las Torres de Serranos con un concierto.
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