Copenhague, 30 nov (.).- El fabricante de automóviles sueco Volvo (ST:VOLVb) Cars registró un beneficio neto de 11.900 millones de coronas suecas (1.158 millones de euros) en los nueve primeros meses del año, cinco veces más que en el mismo período de 2020.
El beneficio neto de explotación (ebit) ascendió a 16.600 millones de coronas suecas (1.615 millones de euros), un 363 % más interanual, informó hoy la compañía.
La facturación fue de 202.000 millones de coronas suecas (19.655 millones de euros), lo que supone una subida del 14 %.
El tercer trimestre estuvo marcado por la falta general de semiconductores y los nuevos brotes de coronavirus en el sudeste asiático, que afectaron a los proveedores y provocaron parones temporales en la producción de las fábricas (50.000 vehículos menos producidos respecto al mismo período de 2020).
Así, el beneficio neto cayó un 31 %, hasta 2.300 millones de coronas suecas (224 millones de euros) y el ebit fue de 3.300 millones de coronas suecas (321 millones de euros), un 27 % inferior.
La facturación ascendió a 60.800 millones de coronas suecas (5.916 millones de euros), un descenso interanual del 7 %.
Volvo Cars anunció a principios de octubre su salida a bolsa, después de varios aplazamientos, con una oferta pública de venta de acciones (OPV) para recaudar 20.000 millones de coronas suecas (2.000 millones de euros).
La firma china Geely, que compró el fabricante sueco a la estadounidense Ford (NYSE:F) en 2010, mantiene alrededor del 82 % del total.
La salida a bolsa, la segunda mayor en la historia de Suecia, se produjo el pasado 29 de octubre, con un precio inicial de 53 coronas (5,16 euros) por título.
Desde entonces el curso ha experimentado oscilaciones notables, y al cierre de la sesión de ayer las acciones cotizaban a 68,50 coronas suecas (6,67 euros), un 29 % más.
Con esta operación bursátil, Volvo Cars pretende recaudar fondos para impulsar su conversión en productor de vehículos eléctricos, el único tipo de automóviles que quiere vender en 2030.