Nueva York, 9 abr (EFE).- Wall Street abrió hoy con subidas moderadas y el Dow Jones de Industriales avanzaba un 0,20 %, en un inicio optimista de una jornada en la que se mirará con atención la publicación de las actas de la última reunión de la Reserva Federal.
Media hora después del inicio de la sesión, ese índice, el más representativo de Wall Street, ganaba 33,04 puntos para situarse en 16.289,18 enteros, mientras que el selectivo S&P 500 subía un 0,15 % (2,73 unidades) y se colocaba en 1.854,69 puntos.
El índice compuesto del mercado Nasdaq ganaba por su parte un 0,44 % (18,26 enteros) hasta 4.131,24 unidades.
Los inversores amanecieron hoy con buen ánimo, después de que Alcoa anunció tras el cierre de ayer unos resultados trimestrales ligeramente superiores a los previstos por los analistas financieros.
A esta hora, Alcoa, el gigante del aluminio que tradicionalmente abre la temporada de presentación de resultados financieros en Estados Unidos, subía cerca de un 4 %.
Además, los mercados esperan con mucho interés la publicación a las 18.00 GMT de las actas de la última reunión del Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal, a fin de evaluar el análisis de la institución de la economía nacional y las perspectivas de eliminación del estímulo monetario y de un posible aumento de tipos de interés.
Dos tercios de los 30 integrantes del Dow Jones de Industriales registraban subidas, encabezadas por Merck (1,56 %), Cisco (1,22 %) y Microsoft (0,85 %).
Procter & Gamble avanzaba un 0,81 % tras anunciar que ha vendido a Mars la mayor parte de su negocio de alimentación de mascotas por 2.900 millones de dólares.
Las operadoras de telecomunicaciones sufrían los mayores descensos, pues ATT perdía un 0,79 % y Verizon se dejaba un 0,54 %.
Entre los grandes valores tecnológicos del Nasdaq, Facebook avanzaba un sólido 2,56 %, Yahoo ganaba un 0,83 % y Apple un ligero 0,32 %.
En otros mercados, el petróleo de Texas subía mínimamente hasta 102,61 dólares por barril, mientras que el oro bajaba a 1.302,40 dólares la onza.
La rentabilidad de la deuda estadounidense a 10 años subía hasta el 2,7062 % y el dólar seguía perdiendo terreno ante el euro, que se cambiaba a 1,3811 dólares.