Por Inmaculada Sanz y Julien Toyer
MADRID (Reuters) - Andalucía levanta el telón del año electoral en España este fin de semana, cuando la región más poblada y con más desempleo del país podría arrojar pistas sobre cuál será el panorama nacional tras las generales de final de año.
Unos 6,5 millones de andaluces están llamados a votar en una región gobernada desde hace 33 años por los socialistas y en la que los sondeos dicen que emergerán fuerzas políticas surgidas al calor del descontento ciudadano con la crisis.
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) sería el más votado en las ocho provincias andaluzas, pero necesitaría apoyos para gobernar una región tradicionalmente de izquierdas regida desde 2012 en coalición con Izquierda Unida (IU).
Según unas encuestas que cifran los indecisos en un tercio del electorado, el Parlamento quedará más fragmentado que el actual, pasando de tres a cinco partidos y obligando a acuerdos totales o puntuales que podrían reproducirse a nivel nacional tras las generales.
"Andalucía tiene un papel crucial porque marca las pautas de lo que pasa a nivel nacional", dijo a Reuters Lucía Ayala, candidata por Almería de Podemos, el partido antiausteridad que ha dinamitado el panorama político en España en el último año.
Además de a PSOE, Partido Popular (PP) e IU, el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) da representación a Podemos, al que sitúa como segunda fuerza, y al centrista Ciudadanos, cuarto por detrás del PP y por delante de IU.
Ciudadanos, que no existía en Andalucía un mes antes de que se convocaran elecciones en enero, es visto por algunos analistas como bisagra para la gobernabilidad si la candidata socialista, Susana Díaz, cumple su promesa de no pactar con Podemos ni con PP.
"El cambio sensato en Andalucía somos nosotros y, efectivamente, vamos a ser decisivos", dijo el líder nacional de Ciudadanos, Albert Rivera, en una entrevista en El Mundo el martes.
"No es tan importante con quién pactas, sino para qué", dijo el responsable de la formación que, al igual que Podemos, apela al descontento social con un discurso populista.
El político catalán, defensor de la "regeneración" frente al "rupturismo" de Podemos, dijo que condicionaría su apoyo al PSOE a que sea inflexible con la corrupción y dé un giro económico y social en una región con un 34 por ciento de paro.
La corrupción, segundo problema para los andaluces tras el desempleo, ha protagonizado la campaña, llegando el candidato del PP, Juan Manuel Moreno, a plantear el fin del aforamiento de los diputados tras el fraude de los ERE que ha salpicado a los socialistas.
PRIMER GOLPE DEL AÑO AL BIPARTIDISMO
De cumplirse lo sondeos, pese a ser el partido más votado, el PSOE obtendría su peor resultado electoral desde 1982, pasando de 47 a 44 escaños de una cámara de 109, y el PP, que fue el más votado en 2012, ocuparía 34 asientos frente a los 50 logrados entonces.
A Moreno, un desconocido para muchos andaluces y candidato de un PP que nunca ha gobernado Andalucía, le pasarían factura los recortes sociales para atajar el déficit público que el Gobierno central de Mariano Rajoy ha aplicado en los últimos tres años.
Ese retroceso del bipartidismo dejaría lejos para cualquiera de las dos formaciones la mayoría absoluta de 55 diputados, obligando a acuerdos entre ellos o con Podemos, que conseguiría 21-22 escaños, Ciudadanos (5 escaños) o IU (4-5), según el CIS.
El 76 por ciento de los andaluces prefieren que gobierne el partido más votado, según un sondeo de Metroscopia para El País que vaticinaba esta semana 15 escaños para Podemos, 12 para Ciudadanos y 8 para IU.
El indeciso electorado, sin embargo, podría ser determinante, ya que las encuestas muestran que muchos de ellos son antiguos votantes socialistas que están dudando de si dar su apoyo a Podemos o volver a confiar en el PSOE.
El candidato de IU a la presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, vaticinó en una entrevista reciente con Reuters sorpresas para su formación, que en los sondeos pierde los 12 escaños que permitieron gobernar al PSOE los últimos dos años y medio.
Si se confirman los sondeos y el PSOE gobierna, algunos analistas ven probable que Susana Díaz opte por quedarse en Andalucía en lugar de disputar a Pedro Sánchez la candidatura de su partido a la presidencia del Gobierno, como auguraban algunos.
"Es una opción para el PSOE de remontar (a nivel nacional) si le va bien", dijo a Reuters Belén Barreiro, de la consultora MyWorld.
Pese a la atención que despierta Andalucía, Garzón, diputado por Málaga, coincidía con los expertos que dicen que la comunidad autónoma, una de las más turísticas del país, no dará todas las pistas sobre lo que ocurrirá a nivel nacional.
"Andalucía es un territorio con dinámicas propias y diferencias con respecto al resto de España y será solo un reflejo parcial de lo que pueda pasar", concluyó Barreiro.