MADRID (Reuters) - El extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas declaró el lunes en el juicio del caso Gürtel, uno de los mayores escándalos de corrupción política en España, que la formación conservadora tuvo una contabilidad "no oficial", pero negó pagos irregulares.
Bárcenas, que se enfrenta a una condena de hasta 42 años, se sienta en el banquillo por presuntamente gestionar una caja B del Partido Popular con supuestas financiaciones y pagos irregulares, algo que el partido niega, y de la que también se le acusa de haberse beneficiado personalmente.
"Era una contabilidad no oficial, una contabilidad extracontable (...) del Partido Popular", dijo Bárcenas al ser preguntado por el Ministerio Fiscal durante el juicio celebrado en la Audiencia Nacional.
Sin embargo, el extesorero dijo que los empresarios que dieron donativos a la formación durante los años en los que fue responsable de las cuentas del partido no recibieron nada a cambio.
"Eran donativos que no tenían carácter finalista, que no tenían carácter de nada (...) No se contabilizaban oficialmente, lo que es obvio, pero se llevaba un registro de entradas y salidas", añadió el también exsenador del PP.
Bárcenas negó que el Partido Popular hubiese recibido pagos en dinero negro del considerado cabecilla de la trama Gürtel, Rafael Correa, quien durante su declaración el pasado octubre admitió haber pagado comisiones y hecho regalos a ex altos cargos políticos del PP a cambio de contrataciones.
El extesorero dijo que la relación profesional del partido con Correa, que gestionaba eventos y viajes de la formación y que ahora se enfrenta a 125 años de prisión, se rompió porque al empresario "se le subió a la cabeza el nivel de relaciones que tenía" y porque "pensaba que el PP era suyo".
El caso ha causado un gran daño al conservador Partido Popular, que gobierna en minoría el país tras perder la mayoría absoluta con la que gobernó desde 2011, ante la amplitud y dimensión de la supuesta trama de financiaciones, pagos y adjudicaciones ilícitas.
El propio PP está personado en la causa como responsable civil a título lucrativo en un juicio en el que hay 37 personas sentadas en el banquillo.