MADRID (Reuters) - El extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas ha acusado a las distintas cúpulas de la formación de la que llevó las cuentas durante décadas de estar al tanto de un sistema de financiación paralelo al oficial desde 1982.
En el escrito de defensa presentado el jueves en la Audiencia Nacional y al que tuvo acceso Reuters, el exsenador denuncia un sistema "donde, como en toda pirámide organizativa jerárquica, las instrucciones emanaban de arriba a abajo".
Hasta ahora, Bárcenas se había referido a un sistema ilegal contable durante dos décadas, pero ahora se remonta a 1982, cuando el partido adoptaba su anterior nombre, Alianza Popular, bajo la dirección del exministro y expresidente de la Xunta Manuel Fraga.
Bárcenas describe su función como la de "mero amanuense" de las donaciones de empresarios que recibían directamente Fraga y después los expresidentes del PP Antonio Hernández Mancha, José María Aznar y Mariano Rajoy, acusación que el actual jefe del Ejecutivo niega.
"El sistema de financiación del Partido Popular venía institucionalizado desde al menos el año 1982", añade el escrito, que recoge que distintos informes apuntan a que todos partidos mayoritarios en España se han financiado ilegalmente durante años.
El escrito ha sido presentado por la defensa de Bárcenas ante el juez José de la Mata, que abrió juicio oral contra Bárcenas y el también extesorero Álvaro Lapuerta el pasado mayo por la contabilidad B del partido en el poder, al que se cita como responsable civil subsidiario en la causa.
El portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando, dijo que su anterior compañero de partido estaba intentando eludir responsabilidades y explicar de dónde había sacado los más de 40 millones de euros que ha admitido tener en un banco en Suiza.
"La caja B del señor Bárcenas es del señor Bárcenas, y no del PP", dijo Hernando en el Congreso.
El escándalo desatado por Bárcenas, que ha pasado 19 meses en prisión mientras se investigaba su implicación en la trama de corrupción Gürtel, ha supuesto un duro revés para la imagen del PP, colmando la indignación de los españoles ante los numerosos casos de corrupción en sus filas.
No es probable que el juicio se celebre a lo largo de 2015, según una fuente judicial, evitando un posible sonrojo para el Partido Popular, que a finales de año se enfrenta a unas elecciones generales después de haber sufrido un revés en los comicios municipales y autonómicos del 24 de mayo.