PEKÍN (Reuters) - China aprobó el sábado una ley de contraespionaje que busca reforzar la seguridad del Estado y ayudar en la construcción de un sistema de seguridad nacional "integral", según información de medios estatales.
La legislación le permitirá a las autoridades precintar o incautar cualquier propiedad vinculada a actividades consideradas perjudiciales para el país, informó la agencia de medios Xinhua.
Las autoridades también pueden pedirle a las organizaciones o individuos que interrumpan o modifiquen cualquier comportamiento que se considere dañino para los intereses de China, dijo Xinhua.
La negativa a cumplir con las reglas le permitirá a las agencias encargadas del cumplimiento de la ley confiscar propiedades.
La posesión de equipos de espionaje -según lo que el Departamento de Seguridad estatal define como espionaje- también es ilegal bajo la norma aprobada, agregó Xinhua.
La agencia de prensa no facilitó más detalles.
Como China ya tiene leyes amplias que regulan el secreto de Estado y la seguridad, no queda claro hasta qué punto la nueva normativa -que se aprobó con la revisión y cambio de nombre de una ley de seguridad nacional anterior, por primera vez en 21 años- incrementaría las facultades de la policía.
La revisión de la ley de seguridad se produce tras la reunión del mes pasado del Partido Comunista, en la que se prometió que los tribunales tendrían más independencia y que se acotaría la influencia de los responsables sobre casos legales, aunque algunos consideraron que a tales promesas les faltó contenido.
El Parlamento revisó además una "ley de procedimiento administrativo", que aumentaría el derecho de las personas a demandar al Gobierno.
Los demandados en tales casos, como responsables del Gobierno, podrían ser multados o detenidos si "fuerzan a un demandante a retirar la querella usando medios ilegales, como amenazas o fraude", informó Xinhua.