PEKÍN, 9 dic (Reuters) - Australia, Reino Unido y Estados Unidos pagarán un precio por sus "decisiones equivocadas" tras decidir no enviar delegaciones gubernamentales a los Juegos Olímpicos de Invierno de febrero en Pekín, dijo el jueves el Ministerio de Asuntos Exteriores de China.
Estados Unidos fue el primero en anunciar el boicot, diciendo el lunes que sus representantes gubernamentales no asistirían a los Juegos del 4 al 20 de febrero debido a las "atrocidades" de China en materia de derechos humanos, semanas después de las conversaciones destinadas a aliviar la tensión entre las dos mayores economías del mundo.
"Estados Unidos, Reino Unido y Australia han utilizado la plataforma de los Juegos Olímpicos para la manipulación política", dijo Wang Wenbin, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino.
"Tendrán que pagar el precio de sus actos erróneos", dijo en una conferencia de prensa habitual.
Las relaciones entre Pekín y Washington se deterioraron fuertemente bajo el mandato del expresidente estadounidense Donald Trump y la administración de Biden ha mantenido la presión sobre China.
Los desacuerdos se han centrado en varias cuestiones, como el comercio, los orígenes del coronavirus y las reclamaciones marítimas de China en el mar de China Meridional.
El primer ministro australiano, Scott Morrison (LON:MRW), dijo anteriormente que su decisión de no enviar representantes a los Juegos se debió a sus esfuerzos por reabrir los canales diplomáticos con China para discutir los derechos humanos en la región de Xinjiang, en el extremo occidental del país, y a las medidas de China para bloquear las importaciones australianas.
China ha negado cualquier infracción en Xinjiang, región que alberga a la minoría musulmana uigur, y ha dicho que las acusaciones de abusos contra los derechos eran inventadas.
El miércoles, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó una ley para prohibir las importaciones procedentes de Xinjiang por la preocupación que suscitan los trabajos forzados, una de las tres medidas respaldadas de forma abrumadora por Washington para hacer frente al trato que da Pekín a la comunidad uigur.
(Reporte de Yew Lun Tian, Jing Xu y Stella Qiu; redacción de Ryan Woo; edición de Clarence Fernandez, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdansk)