Por Raquel Castillo y Sam Edwards
MADRID/BARCELONA (Reuters) - Decenas de miles de personas se manifestaron el sábado en toda España en diversas convocatorias en defensa de la unidad del país y a favor del diálogo, mientras continúa el pulso entre el Gobierno central y el Ejecutivo catalán tras el referéndum independentista del 1-O.
En Madrid, la céntrica plaza de Colón aparecía abarrotada desde media mañana por miles de personas que ondeaban banderas de España y alguna senyera, en un ambiente festivo en apoyo a la Constitución y a la unidad del país, que vive su peor crisis política en décadas.
A ritmo de pasodobles y rumba catalana, los manifestantes, entre ellos multitud de familias con niños, gritaban "Viva España" y "Viva Cataluña", "Puigdemont a prisión" y portaban pancartas como "No estáis solos" o "Se nos oye menos pero somos más".
"He venido porque me siento muy española y me da mucha pena lo que está pasando. Intento estar aquí por la unidad, porque también me siento muy catalana. Mi familia vive en Cataluña", dijo Rosa Borrás, una secretaria en paro de 59 años, que habló a Reuters entre lágrimas.
"No pueden dividir familias", agregó Borrás, con una pegatina en la espalda con el texto "Cataluña te queremos", dentro de un corazón.
A unos cientos de metros, en la plaza de Cibeles y ante el Ayuntamiento de la capital española, miles de personas vestidas de blanco respondían a la iniciativa de la plataforma "Parlem, Hablemos" llamando al diálogo, convocada en unas 50 ciudades españolas.
"Lo que hace falta es sentarse a dialogar y que no nos sigan dividiendo", dijo Guillermo Fernández, organizador de la iniciativa, en declaraciones al canal de televisión La Sexta.
En el último giro de los acontecimientos, el Parlament de Cataluña convocó el viernes un pleno para el martes para que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, informe sobre la situación política actual. [nL8N1MH48F]
La convocatoria de este pleno se produce después de que el Tribunal Constitucional suspendiera la víspera la convocatoria de otro pleno previsto para el lunes en el que presumiblemente iba a debatirse una declaración unilateral de independencia.
En Barcelona, alrededor de 2.000 personas se dieron cita en la plaza de Sant Jaume, algunos con camisetas que pedían "Si us plau, dialoguen" (por favor, dialoguen)
"Se está produciendo una fractura social en Cataluña y aquí eso hay que resolverlo por la vía del dialogo, nunca de unilateralismo de uno o de otro", dijo José Manuel García, un economista de 61 años que acudió a la concentración vestido de blanco.
Los resultados definitivos en el referéndum del 1-O paralizado por el Tribunal Constitucional arrojaron una participación de 2,28 millones de personas, un 43 por ciento del censo electoral, con un 90,18 por ciento a favor del "Sí" a la independencia, según datos publicados el viernes en el sitio web de la Generalitat.
La incertidumbre sobre los próximos episodios del tenso pulso institucional que mantienen el Gobierno catalán y el español, entre ellos la posibilidad de una declaración de independencia, está provocando una fuga de empresas hacia otras comunidades españolas.