WASHINGTON, 14 dic (Reuters) - Estados Unidos impuso el lunes sanciones a Turquía por la compra de un sistema de defensa ruso tierra-aire, las que apuntaron al principal organismo turco de desarrollo de defensa, su presidente y tres empleados.
La medida, aunque se centra en el sector de la defensa y la Dirección de Industrias de Defensa de Turquía (SSB), ha sido condenada por Ankara, y es probable que dañe aún más las relaciones del presidente turco Tayyip Erdogan con los aliados occidentales de la OTAN.
Las sanciones, reportadas por primera vez por Reuters la semana pasada, incluyen la prohibición de todas las licencias de exportación de Estados Unidos, así como la congelación de activos y restricciones de visa para el presidente de la SSB, Ismail Demir, y otros tres empleados.
La medida amenaza con perjudicar la economía de Turquía en un momento en que está luchando con una crisis provocada por el coronavirus y una inflación de dos dígitos.
Ankara adquirió las defensas rusas tierra-aire S-400 a mediados de 2019 y dice que no suponen una amenaza para los aliados de la OTAN. Washington no está de acuerdo y ha amenazado con sanciones desde hace tiempo, y el año pasado sacó a Turquía de un programa de aviones F-35.
Las medidas anunciadas el lunes bajo la Ley para Contrarrestar a los Adversarios de Estados Unidos a través de Sanciones (CAATSA) serían promulgadas por el presidente de Donald Trump, mientras que el mandatario electo Joe Biden se prepara para asumir el cargo el 20 de enero.
Justo antes del anuncio de Estados Unidos, Erdogan dijo que la retórica de las sanciones era molesta.
"De nuestro aliado de la OTAN, Estados Unidos, esperamos apoyo en nuestra batalla contra las organizaciones y fuerzas terroristas que tienen planes para nuestra región, no sanciones", dijo después de una reunión de gabinete.
(Reporte de Humeyra Pamuk; reporte adicional de Tuvan Gumrukcu en Ankara y Jonathan Spicer en Estambul; Editado en español por Javier López de Lérida)