Por Paul Carrel
BERLÍN (Reuters) - El respaldo a los conservadores de la canciller alemana, Angela Merkel, ha descendido hasta el 38 por ciento ha mostrado una encuesta este miércoles, el apoyo más bajo desde junio de 2014 y que coincide con una disputa en el seno del bloque sobre cómo gestionar la crisis de los refugiados.
Merkel y Horst Seehofer, el líder del partido hermanado de Baviera, han estado enfrentados sobre la forma en la que Alemania ha reaccionado al flujo de refugiados.
Alemania, uno de los destinos que más persiguen los refugiados que huyen de conflictos en Oriente Próximo, espera recibir entre 800.000 y un millón de solicitudes de asilo este año, una cifra récord.
Mientras que Merkel se ha mostrado favorable a una política aperturista y ha insistido en que Alemania puede hacer frente al flujo, Seehofer, líder de Baviera, ha adoptado una postura más extremista y la región que preside ha amenazado con llevar al Gobierno central a juicio si no pone límites a la oleada de solicitantes de asilo que reciben.
La encuesta Forsa muestra que el apoyo a la alianza conservadora ha bajado un uno por ciento, hasta situarse en el 38 por ciento.
Por su parte, el partido Verde subió un punto en la última semana y se sitúa en el 10 por ciento de apoyo, mientras que el respaldo al Partido Socialdemócrata (SDP), socios de Gobierno de Merkel, se mantiene en el 25 por ciento y el apoyo a Linke, una formación de ultraizquierda, permanece en el 9 por ciento.
El partido de derechas Alternativa por Alemania (AfD), que es partidario de una línea dura en materia de inmigración, permanece sin cambios en el 7 por ciento a nivel nacional. En la región de Baviera, que comparte frontera con Austria y que se ha convertido en ruta de paso, el AfD sube hasta el 9 por ciento, mientras que en regiones del este de Alemania el apoyo se sitúa en el 13 por ciento.
La proporción de personas que no votan e indecisos es de un 34 por ciento, tras aumentar en la última encuesta un uno por ciento.
"La disputa entre Seehofer y Merkel está irritando a algunos seguidores de los conservadores, pero no se están movilizando hacia otros partidos, solo se declaran indecisos", dijo el director de Forsa, Manfred Guellner.
La popularidad de Merkel ha sufrido un batacazo debido a la crisis de los refugiados, sin embargo continua siendo una de las líderes germanas más importantes después de la Segunda Guerra Mundial.