JARTUM, 8 dic (Reuters) - Decenas de personas han muerto en los episodios de violencia ocurridos esta semana en una zona de la región sudanesa de Darfur Occidental, de donde miles de personas se han visto obligadas a huir, según informaron fuentes médicas locales.
El Comité de Médicos de Darfur Occidental dijo que los ataques comenzaron en el área de Kreinik el sábado.
"Han creado una ola de desplazamientos desde las afueras hacia la ciudad, con una situación humanitaria que puede calificarse, como mínimo, de catastrófica", dijo el comité.
Unas 88 personas murieron y 84 resultaron heridas, dijo.
Un residente de Kreinik dijo que un campamento de desplazados había sido arrasado y que miles de personas habían buscado refugio en edificios del Estado.
"La zona está completamente destruida", dijo el residente.
Diversos analistas afirman que un acuerdo de paz firmado por algunos grupos rebeldes en octubre de 2020 fue una de las causas de los disturbios, ya que los grupos locales se disputaban el poder. Una misión conjunta de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas y la Unión Africana dejó de patrullar la zona en enero
Grupos de ayuda humanitaria afirmaron que recientemente se ha producido un aumento de los conflictos en toda la región de Darfur.
El Comité de Coordinación de Campos de Refugiados y Desplazados, una ONG local, dijo el miércoles que se había reanudado la violencia en la zona de Jebel Moon, en el norte de Darfur, donde los trabajadores humanitarios informaron de la muerte de 43 personas y del desplazamiento de 10.000 como consecuencia de la violencia del mes pasado.
El campo de refugiados de Zamzam estaba siendo rodeado por las milicias el miércoles y la zona de Donki Shata, en el norte de Darfur, también fue atacada, dijo el comité.
El conflicto de principios de la década de 2000 en Darfur entre los grupos rebeldes, por un lado, y las fuerzas gubernamentales y las milicias aliadas, por otro, ha causado unas 300.000 muertes. Unos 2,5 millones de personas viven en campos de desplazados en todo Darfur, según la agencia de la ONU para los refugiados, ACNUR.
El Comité de Coordinación y los residentes de Darfur se quejan de que las milicias siguen llevando a cabo ataques contra pueblos y campamentos.
Unas 430.000 personas han sido desplazadas en el último año, lo que supone un aumento de cuatro veces respecto a 2020, según los grupos de ayuda.
"Las autoridades nacionales y la comunidad internacional deben hacer frente urgentemente a la sangrienta realidad de esta espiral de violencia", declaró el miércoles en un comunicado Will Carter, del Consejo Noruego para los Refugiados.
(Información de Nafisa Eltahir y Khalid Abdelaziz; edición de Angus MacSwan; traducción de Darío Fernández)