LONDRES (Reuters) - Andy Burnham, el favorito para convertirse en el nuevo líder de la oposición laborista en el Reino Unido, pidió un referéndum sobre la pertenencia del país a la Unión Europea, y dijo que exigiría que tuviera lugar en 2016 si finalmente llegaba a dirigir el partido.
La promesa de Burnham de apoyar el referéndum es una ruptura con la postura de tintes izquierdistas del Partido Laborista, que suponía apoyar una consulta sólo si se producía un transvase importante de poderes de Londres a Bruselas.
Dijo que la votación era necesaria en 2016, antes de 2017 como planea el ejecutivo conservador, para evitar la incertidumbre en torno a la economía británica. El domingo comenzó su campaña para hacerse con el liderato del partido con una serie de entrevistas.
"Bajo mi liderazgo, el Partido Laborista no estará en ese escenario a regañadientes. Abrazaremos el referéndum. Debería adelantarse a 2016", dijo Burnham al periódico The Observer el domingo.
"A nadie le interesa que esto siga deambulando por el Parlamento", añadió.
El primer ministro británico, David Cameron, reelegido en las elecciones generales de mayo, dijo esta semana que celebraría una votación sobre la pertenencia del país a la Unión Europea antes de finales de 2017 si era posible, después de reconfigurar los lazos entre Reino Unido y la UE.
El anterior líder de los laboristas, Ed Miliband, que se oponía a la consulta, dimitió tras una dura derrota electoral, desatando un debate sobre si cambiar la postura del partido de cara a unas elecciones donde se decidirá el nuevo líder y que tendrán lugar el 12 de septiembre.
Burnham, que se describe como "fuertemente europeísta", dijo que era necesaria una renegociación de los vínculos entre la UE y Reino Unido para convencer a los votantes británicos de las ventajas de permanecer en el bloque.
"Hay claramente muchas ganas de hacer un referéndum... esto es lo que pide el público", dijo sobre su apoyo a la idea en una entrevista en la BBC.
"Para mí, está claro que lo que más le conviene al Reino Unido es permanecer en la UE, pero estoy advirtiendo de que la única forma posible de ganar esa discusión es si tenemos un paquete creíble de reformas sobre inmigración".
La preocupación de los votantes por esta última materia quedó patente con la fuerza demostrada en las elecciones por el partido anti-europeísta, el UKIP, que se situó en tercer lugar con el 13 por ciento del voto popular.
Burnham se presenta para la dirección del partido junto a la portavoz de Interior, Yvette Cooper, la de Salud, Liz Kendall, y la de Desarrollo Internacional, Mary Creagh.
El Partido Laborista también tiene que reconstruir su credibilidad económica y sus lazos con la comunidad empresarial, dijo Burham en un evento en Londres el sábado.